Teléfono rojo/José Ureña
La mota no cura, ni mata
Por diferentes motivos, muchas personas se encuentran hundidas en una depresión, que además de afectar su humor y su rutina, les impide disfrutar el día. Los aleja de la felicidad.
Y por supuesto, diga lo que diga la Corte, la “mota” no los alivia. Qué buena disposición, empero, del máximo tribunal. Pero mientras entra en vigor para todos –solo se concedió su uso a un grupo de cuatro— mantengámonos alertas, y en espera que aterrice esa panacea en beneficio de los que disfrutan la droga. O de los que creen que cura todo, hasta la incultura.
“Por qué tantos brincos estando el suelo tan parejo”, afirma don Raúl Basurto Morales, entusiasta agricultor en California. Con certeza asevera que “la mota no mata, ni a quien le detiene la pata”. “Quien quiera fumarla. Que lo haga. Quién, no, Pos no. Y ya. Así de simple”. Y tiene toda la razón, Como de costumbre.
Claro que superar la angustia no es fácil. Con fortaleza y voluntad, pueden transformarla en el comienzo de una etapa de cambios.
Si estás en un momento como éste, no dejes de leer estos simples consejos y cambios de hábitos. Te ayudarán a superar la angustia y el abatimiento, para sonreír a la vida.
Sin marihuana de por medio. Ni la recomiendo ni la condeno. Sino todo lo contrario.
Diríamos que “Todos quieren felicidad sin dolor, pero no se puede tener un arco iris sin un poco de lluvia.”
Comparar tu vida y tus logros con los de otras personas puede tener un fuerte impacto negativo sobre tu autoestima. Generar sentimientos negativos. Cambia este hábito. Concéntrate en ti mismo.
En un momento observar los logros que has alcanzado a lo largo del camino. Lo que has obtenido. Las circunstancias que has logrado superar, y al progreso de las metas y proyectos.
“Ser sencillo, es lo que te haces grande”, no lo olvides nunca.
Aprende a ser amable y tolerante tanto con los demás como contigo mismo. Criticar a las personas afecta la visión de tu propio comportamiento.
Terminar la relación o amistad que ya no contribuye a tu felicidad, es aconsejable. Aferrarse a una persona que no te da el trato que mereces, es una de las consecuencias del estrés. Liberarte de una relación tóxica. Las rupturas y separaciones son momentos difíciles de atravesar que debemos aprender a superar. No hablamos de divorcio. Que conste.
Perdonar a la persona que nos lastimó es una de las partes más difíciles del proceso, en especial cuando el corazón está lleno de rencor y resentimiento. . Recuerda que el perdón es parte del proceso de recuperación y crecimiento personal.
“La felicidad no depende de lo que uno tiene, sino del buen uso que hace de lo que tiene”. No olvidarlo, nunca.
En nuestra cultura, el “Si”, está asociado a un sentimiento de bondad, desinterés, solidaridad, y generosidad, “NO” tiene una percepción negativa. Por esta razón, es importante comprender que decir “No” de vez en cuando, no te hace peor persona.
“Más vale hacer y arrepentirse, que no hacer y arrepentirse”
Encontrar la felicidad a través de la perfección, es un objetivo difícil de lograr. Hay que establecer parámetros altos. Evaluar nuestra actitud y desempeño para no afectar autoestima, y creer que nuestras capacidades o talentos no son lo suficientemente buenos. Aprender a dejar de lado nuestra actitud perfeccionista, para valorar logros y aprender de nuestros errores sin frustración.
Recuerda que una de las mejores formas de controlar el perfeccionismo es fijar fechas límite. Podrás dar lo mejor de ti, dentro de un plazo específico, ya sea en el trabajo o en el hogar.
“La fuerza hidráulica más poderosa, no lo olvides nunca, es la lágrima de una mujer”, lo debemos saber por experiencia propia, ¿verdad, Bety?
Dejar de pensar en el pasado o de sentirse ansioso por el futuro es algo casi imposible de lograr. Sin embargo, este cambio apunta a controlar esos momentos en que nos sentimos invadidos por la ansiedad, la incertidumbre, o la melancolía. Focaliza toda tu energía en el presente y disfruta de las pequeñas cosas de la vida.
Porque vivir el presente permite aprender de los errores del pasado, y utilizar esa experiencia, mejora tus decisiones en el futuro. Es importante señalar que vivir el presente no significa dejar de planificar un futuro cercano.
Erradicar los pensamientos negativos fortalecen la mente y el corazón. Superas cualquier problema o circunstancia con facilidad. Además, al liberarte de lo negativo podrás acercarte a tus metas, y estar en armonía con tu entorno y contigo mismo. Y acabar con la maldita depresión. Sin que tengas que sembrar, cosechar y fumar la llamada antaño “Juanita”.
Un penúltimo consejo de su amigo:
“”Sé humilde para admitir tus errores. Inteligente para aprender de ellos y maduro para corregirlos”