Escenario político
Valorar su vida, consejo divino
Cierto, debes comprender que el silencio vale más que mil palabras. Pero cuando nos comparten algo bello, nuestra obligación es darlo a conocer. Esta es la función de los comunicadores. Por ello hoy presumimos la versión de don Eduardo Ravelo Galindo, mi hermanito. Que estuvo en el seminario ‘El Salitre’, Michoacán, hace más de medio siglo.
Un periodista que entrevistó a Dios, le preguntó: ¿qué es lo que más te sorprende de la humanidad?
“Se aburre de ser niño y quiere crecer rápido, para después desear ser niño otra vez.
“Que desperdicie la salud para hacer dinero y luego pierda el dinero para recuperar salud.
“Que ansía el futuro y olvide el presente y así no viva ni el presente ni el futuro.
“Que viva como si nunca fuese a morir y muera como si nunca hubiera vivido”.
El reportero meditó en silencio un rato y le preguntó:
–Padre, ¿cuáles son las lecciones de vida que tus hijos debieran aprender?
Con una sonrisa le respondió: “valorar su vida. Aprender que no pueden hacer que nadie los ame, sino dejarse amar. Porque lo más valioso en la vida no es lo que tenemos sino a quien tenemos. Y cómo lo logramos.
“Una persona rica no es quien tiene más, sino quien necesita menos. El dinero puede comprar todo, menos la felicidad. El físico atrae, pero la personalidad enamora.
“Quien no valora lo que tiene, algún día se lamentará por haberlo perdido. Y quien hace mal algún día recibirá su pago.
“Si quieres ser feliz haz feliz a alguien. Si quieres recibir, da un poco de ti, rodéate de buenas personas y se una de ellas.
“¡Recuerda, a veces de quien menos esperas es quien te hará vivir buenas experiencias!
“Nunca arruines tu presente por un pasado que no tiene futuro: una persona fuerte debe saber cómo mantener en orden su vida.
“Aun con lágrimas en los ojos, se las arregla para decir con una sonrisa, estoy bien. Gracias”.
Al ver la tristeza del pueblo pronosticó a quien lo interrogaba que los tiempos duros decrecen. Y pidió ser el conducto para que la gente, creyente o no, tenga fe y confianza en su vicario, Francisco, que estará en su representación, en breve.
Bienvenidos, los dos.