Duplicará Brugada recursos de programa Colibrí para viajar a Acapulco
-Mira mamá ahí va Dios.
“Si hijo, pídele para que te portes bien y para que te vaya bien en la escuela”
CIUDAD DE MEXICO, 24 de marzo de 2016.- La 173 representación de la Pasión de Cristo en Iztapalapa se destacó por el gran operativo policiaco que se desplegó en los ocho barrios, con el objetivo de resguardar a la gente que asistió al arranque de actividades del Jueves Santo, lo que generó un poco de molestia porque no permitían el paso libre.
Ante esta “mayoría azul”, varias personas se quejaron por la presencia poco efectiva de los granaderos de la Secretaria de Seguridad Pública capitalina (SSP), ya que más que ayudar estorbaban para los asistentes y actores.
“Los granaderos estorban con sus escudos, les pides que se muevan y no lo hacen, si ven que queremos meternos para la banqueta nos dicen que no, van pasando los caballos y hay un riesgo de salir golpeado o hasta arrollado por los animales.
“No está mal que haya seguridad, pero tampoco en exceso y que no estorben, eso es lo que nos disgusta, porque no se siente una libertad para poder moverse y disfrutar las actuaciones”, se quejó un feligrés que buscaba cruzar la avenida Rojo Gómez.
Durante el trayecto del Cristo de Iztapalapa por las calles de los ocho barrios, el cuerpo de seguridad de la SSP, de la delegación, Protección Civil y Seguridad y Logística endurecieron las filtros y las cadenas para acercarse al actor.
Este tipo de acciones molestaron a más de uno, ya que unas de las tradiciones es el poder tocar y, cierta forma, convivir con el Cristo, pero ante las órdenes de restringir estos hechos, la gente decidió hacerse a un lado y no participar como antes.
“Es increíble que si traemos niños y van acompañando al actor principal, no dejen que nos podamos acercar un poco, te piden que te muevas más rápido, que no interrumpas o al grado de decirte no estorbes.
“Los que más estorban son estos de seguridad, están parados y nos estorban, es increíble que no podamos hacer lo que otros años, ahora sí se pasaron de listo”, recriminó una madre.
Y es que la SSP destinó poco más de 10 mil efectivos para cuidar las acciones en esta celebración, además de que la PGJDF puso a mil 400 agentes para resguardar a los asistentes.
Mientras que las autoridades delegacionales aseguraron que para este Jueves Santo llegaron 100 mil personas, además de que se reportó saldo blanco durante a este primer día de actividades.
Ya en el templete, el Cristo de Iztapalapa escenificó la Última Cena y el lavatorio de pies de sus apóstoles, previo a su aprehensión y entrega a los romanos.
Al final, los policías tomaron las vallas que protegen el escenario principal para que no se rompiera el orden de la noche.