Transparencia, el reto de la transición al Inegi y la reforma necesaria
MÉXICO, DF, 10 de enero de 2015.- Diputados aprobaron un proyecto de decreto por el que se exenta de la solicitud de autorización de uso y del pago de los derechos patrimoniales o regalías a los autores por la publicación sin fines de lucro, de obras artísticas, literarias, en soportes, materiales dirigidos al adelanto de las personas con discapacidad, con la finalidad de acercarlas al mundo de las artes y la cultura.
La iniciativa propuesta por el entonces senador del PAN Guillermo Tamborrel, y turnada a la Comisión de Cultura y Cinematografía de la Cámara de Diputados, adiciona la fracción VIII al artículo 148 de la Ley Federal de Derechos de Autor, para quedar como sigue:
Artículo 148.
1. Reproducción para constancia en un procedimiento judicial administrativo;
VII. Reproducción, comunicación y distribución por medio de dibujos, pinturas, fotografías y procedimientos audiovisuales de las obras que sean visibles desde lugares públicos, y
VIII. Publicación de obra artística y literaria sin fines de lucro para personas con discapacidad.
La presidenta de la Comisión diputada Margarita Saldaña Hernández, fundamentó que en México no se ha constituido un mercado o un número relevante de empresas que se dediquen a publicar materiales especiales para personas con discapacidad.
Por el contrario, en la actualidad es muy limitado el número de obras artísticas y literarias en soportes accesibles que atiendan el universo de discapacidades.
Por ello, enfatizó que esta circunstancia resulta del todo excluyente y discriminatoria ya que aleja a las personas con discapacidad de los diferentes lenguajes, del arte, la cultura o la historia.
Al documento aprobado se incorporó información estadística del Inegi, derivada del Censo de Población y Vivienda de 2010, donde se establece que en México existen 5.7 millones de personas con alguna discapacidad, de las cuales, el 48 por ciento son adultos mayores de 59 años, y 2 de cada 10, son menores de 30 años.
De lo anterior, señaló que el universo de personas con discapacidad constituye un sector de la población que requiere no sólo de servicios educativos, sino de la accesibilidad a las expresiones del arte y la cultura que les permita desarrollar en lo posible y de manera armónica sus cualidades cognitivas a efecto de aspirar a una mejor calidad de vida.
De esta iniciativa, dijo que adquiere una dimensión relevante en virtud de que sin fines de lucro se podría contar con un mecanismo de accesibilidad como lo establece la Convención sobre los Derechos de las Personas con Discapacidad que posibilite acercar las obras artísticas y literarias en distintos formatos y soportes a un número estimado de un millón de personas que potencialmente demandarían de estos productos.