Exigen a legisladores aumentar impuesto a bebidas azucaradas

MÉXICO, DF., 25 de octubre de 2015.- Representantes en México de la Fundación Interamericana del Corazón y la Coalición Latinoamérica Saludable (CLAS) solicitaron a diputados y senadores de las comisiones de Salud y Hacienda en nuestro país, aumentar el impuesto a las bebidas azucaradas en lugar de reducirlo.

En una carta que será enviada este lunes a ambas Cámaras, los representantes de más de 250 organizaciones no gubernamentales en Latinoamérica, señalaron que de no dar marcha atrás a la reducción de este impuesto, los legisladores habrán de contribuir a que en los próximos años, uno de cada tres niños desarrollen diabetes a lo largo de su vida.

Les exigimos legislar para proteger la salud y a los niños de México, dijo el doctor, Jorge Alejandro Ramírez, representante en México de la Fundación Interamericana del Corazón, en una entrevista con la agencia de noticias  Quadratín.

Añade: “nos sentimos indignados que habiéndose demostrado la virtud del aumento del impuesto especial a las bebidas azucaradas, se está ahora aprobando algo contrario a la evidencia de los estudios que demuestran que más de 24 mil muertes al año en nuestro país, se asocian a causas derivadas del alto consumo de bebidas azucaradas y a las enfermedades que se derivan en diabetes, obesidad y problemas del corazón”.

En la carta remitida por la Coalición Latinoamericana Saludable a los senadores José Francisco Yunes Zorrilla (Presidente de la Comisión de Hacienda y Crédito Público) y a Maki Esther Ortiz Domínguez (Presidente de la Comisión de Salud), se señala que peor aún es que el cambio de reducción del 50% al impuesto especial de las bebidas azucaradas que contengan 5 gramos de azúcares añadidos por cada 100 mililitros, afecta a niños y niñas y a los adolescentes en una edad donde los hábitos se forman y duran toda una vida.

La demanda va dirigida también a los diputados, a través de las comisiones de Hacienda y Salud. Por lo cual mandaron la misiva dirigida a Gina Andrea Cruz Blackledge (Presidente de la Comisión de Hacienda y Crédito Público) y a Elías Octavio Íñiguez Mejía (Presidente de la Comisión de Salud). En la misma, expresan que “Estamos ante un momento histórico que requiere de una decisión firme que está en sus manos por lo que reiteramos nuestra disposición para proveer la información que necesiten. Los instamos a corregir el error de reducir el impuesto y promover un aumento al impuesto a las bebidas azucaradas”.

Acotaron que no es fácil ceder ante las presiones comerciales, pero se manifestaron seguros de que en México no se puede “perder la batalla” en el control de la obesidad. Es por ello que firman la carta a los legisladores mexicanos, La Coalición Latinoamérica Saludable (CLAS) y sus miembros que incluyen: la Fundación Interamericana del Corazón y sus afiliadas en México, Argentina, y Caribe; Consumers International, Latinoaméricana ACT+ Brasil, el Instituto de Investigaciones en Salud y Nutrición (ISYN), Quito, Ecuador, Healthy Caribbean Coalition, países del CARICOM, la Alianza para el Control de ECNT Chile, Frente por un Chile Saludable, Fundación EPES en Santiago de Chile, Centro de Investigación para la Epidemia de Tabaquismo CIET-Uruguay, Instituto Nacional de Cáncer en Uruguay, Instituto Brasileiro do Defesa do Consumidor IDEC (Brasil), la FEMAMA en Porto Alegre, Educar Consumidores  de Colombia, Fundación Colombiana de Obesidad (Funcobes), la Mesa por las NCD Colombia, Alianza ENT-Perú, FUNDEPS (Fundación para el Desarrollo de Políticas Sustentables) Argentina, SLACOM Sociedad Latinoamericana y del Caribe de Oncología Médica (regional), la Coalición México Salud-Hable (México), Public Health Institute (México y Brasil) y el World Cancer Research Fund International

Estas  organizaciones manifiestan su preocupación porque se concrete en la Cámara de Senadores  la reducción a ese impuesto de las bebidas azucaradas, debido a que “la reducción del impuesto beneficiaría a una gran cantidad de  bebidas que son intensamente dulces y están dirigidas a niñas y niños pequeños. Bajar el impuesto promoverá su consumo, dañando aún más la salud de los pequeños, fortaleciendo su gusto por sabores intensamente dulces y deteriorando sus hábitos de por vida”.