Denuncia oposición que Morena legisla por medio de fe de erratas
CIUDAD DE MÉXICO, 4 de mayo de 2016.- Ante el anuncio que hizo el presidente de México, Enrique Peña Nieto, respecto de que en el país prevalece “un mal humor social”, pese a que “hay muchas razones y muchos argumentos para decir que México está avanzando”, basta decirle que ese “mal humor” no es gratuito, pues el país se encuentra en una etapa de transición económica y financiera adversa, afirmó el secretario de la Comisión de Presupuesto y Cuenta Pública, de la Cámara de Diputados, Tomás Octaviano Félix.
Para confrontar lo dicho por el presidente, el pasado 27 de abril –en un comunicado emitido por el Fondo Monetario Internacional (FMI)–, señaló que en el Informe titulado Perspectivas Económicas: Las Américas, el pronóstico de crecimiento se ha revisado nuevamente a la baja, ubicando a México con un 2.4 por ciento para el cierre del presente año, cifra por debajo de la estimación de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP), informó el Grupo Parlamentario del PRD a través de un comunicado.
No obstante, el parlamentario dijo que la revisión a la baja en la expectativa de crecimiento para 2016, el organismo estima que México alcanzará un porcentaje de crecimiento de tres por ciento hasta el 2021, por tanto, no hay razones y argumentos suficientes para decir que México está avanzando, al menos en materia económica.
En ese sentido, el diputado refiere que el titular de la SHCP destacó que nuestro país alcanzó su mayor nivel de recaudación tributaria, con la cual se tiene la capacidad de enfrentar con éxito los retos de la economía global.
Pese a este optimismo mostrado –comentó–, la realidad es que las reformas estructurales fiscal y energética no han brindado los resultados que el gobierno federal afanosamente nos quiso vender, ya que el escenario internacional y la situación de la industria petrolera se vislumbran francamente desfavorables.
Señaló que estamos aún “en el primer tercio del año y el Fondo Monetario Internacional le ha enmendado la plana a la Secretaría de Hacienda en materia de crecimiento económico. Falta un trecho muy importante que recorrer y acciones macroeconómicas que implementar. Por tanto, el presidente no puede ni debe hablar de avances con un país pobre y sin esperanzas”.
En ese sentido, queda claro que la promesa de Enrique Peña Nieto de triplicar el crecimiento económico para ubicarlo entre 5 y 6 por ciento, con el argumento de abatir la delincuencia, la pobreza y el desempleo, no va a cumplirse en todo su sexenio, precisó.