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CIUDAD DE MÉXICO, 6 de abril de 2016.- Familiares de personas desaparecidas en Chihuahua asistieron al recinto del Senado de la República y pidieron la intervención de la federación para que el Equipo Argentino de Antropología Forense (EAAF) participe en la identificación de los restos humanos que se encuentran en tres fosas clandestinas.
“¿Por qué el equipo argentino? porque tiene la tecnología adecuada, la tecnología de tercera generación para tener certeza de la identificación porque son restos tan degradados, tan fragmentados que es posible que se terminen, durante años hemos hecho las gestiones”, expresó Gabino Gómez, representante de los familiares desaparecidos.
Durante una conferencia de prensa, explicaron que la situación es grave en aquella entidad en materia de seguridad pública, “no hay confianza en las autoridades de Chihuahua, han cometido muchísimos errores, han comentado muchas fallas”.
Acompañados por funcionarios del organismo Amnistía Internacional (AI) y ante la presencia de la senadora Angélica Peña Gómez, quien preside la comisión de los Derechos Humanos de la cámara alta, solicitaron que se esclarezca los hechos ocurridos en el municipio de ciudad Cuauhtémoc, Chihuahua.
“Sugerimos que en efecto tengamos un punto de acuerdo, en que se pida tanto al respeto al derecho de las familias a nombrar al Equipo Argentino de Antropología Forense como sus peritos y que mientras eso no se haga formalmente, se protejan, no se toquen los restos humanos encontrados en esas tres fosas”, dijo Carlos Zazueta de AI.
En octubre de 2011 se localizó una fosa clandestina en el rancho Dolores, Cuauhtémoc, con cadáveres calcinados, sin que hasta el momento se cuantifiquen con claridad. En noviembre de ese año, se hallaron más restos en El Montero (municipio de Cusihuiriachi), y en febrero de 2012 se detectó una tumba ilegal más en el poblado El Porvenir, del municipio de Carichí.