Refrenda Brugada compromisos con trabajadores del Servicio Público
CHILPANCINGO, Gro., 19 de junio de 2014.- Romana Campos Vega, presunta secuestrada por la Policía Ciudadana de la UPOEG, admitió su parentesco con José Antonio Campos Vega, alias el Chaparro, uno de los principales líderes del grupo delictivo Los Rojos.
En conferencia de prensa, explicó que El Chaparro es su medio hermano y tiene una doble identidad, ya que en Estados Unidos su familia adoptiva lo registró con el nombre de Jaime Guerrero Cuevas.
El Chaparro también es hermano de Hermenegildo Campos Vega, alias El Melo, y Nicolás Campos Vega, alias El Nico, principales líderes de Los Rojos, un remanente del cártel Beltrán Leyva.
Romana Campos Vega fue detenida el 4 junio en Mazatlán por la Policía Ciudadana de la UPOEG, presuntamente por extorsionar y cobrar cuota en los negocios. La mujer fue liberada el viernes 13 de junio y denunció a los comunitarios ante la Procuraduría General de Justicia del Estado (PGJE), por presunto secuestro. Dos horas después, la Policía Ministerial detuvo a una decena de policías ciudadanos.
Este miércoles ofreció una rueda de prensa en Chilpancingo, en la que relató cómo sucedieron los hechos. Contó que los comunitarios la detuvieron a las 7:00 horas del 4 de junio en la capital, cuando ella se dirigía a la escuela y posteriormente fue trasladada a Mazatlán.
Sin embargo, los policías ciudadanos no pueden ingresar a la capital armados. Dijo que una vez que la trasladaron a Mazatlán, la mantuvieron cautiva en una casa abandonada, a donde llegó Maximiliano Moreno Acuña, identificado como el comandante Santos.
“¿Cuánto crees que vale tu vida?”, le habría cuestionado Moreno Acuña para posteriormente comunicarse vía telefónica con su madre, a quién le habría pedido tres millones de pesos por su liberación.
“Para que tu mamá vea que no estamos jugando, y estoy de buenas tú eliges que te corto, si el dedo chito de tu mano, el ojo o tu cabello”, le habría dicho el comandante de la UPOEG.
Acto seguido, dijo, Maximiliano Moreno le cortó un mechón de cabello para mandárselo a sus familiares como muestra. Romana Campos aseguró que tienen grabaciones de las llamadas telefónicas en las que los coordinadores de la UPOEG llegaron a un acuerdo con su familia, en que entregarían 200 mil pesos y los papeles de una casa por su liberación.
La entrega de la casa sería a manera de empeño y tendrían dos meses para que entregaran el millón de pesos restante. Indicó que estuvo cuatro días en el poblado de Mazatlán y posteriormente fue traslada a Xaltianguis, comunidad perteneciente al municipio de Acapulco.
La mujer dijo que reconoce plenamente a sus captores, porque los vio en el tiempo que estuvo en cautiverio. La presunta secuestrada, hermana de los líderes de Los Rojos, dijo que tiene miedo, pues ha recibido amenazas por parte de Maximiliano Acuña Moreno. Responsabilizó al dirigente de la UPOEG, Bruno Placido Valerio, de cualquier cosa que les llegue a suceder a ella o su familia, pues han recibido amenazas por parte de la policía comunitaria.
Romana Campos Vega fue detenida por la UPOEG tras el secuestro de un transportista en el Valle de Ocotito y por su presunta participación en el cobro de cuotas y extorsiones al comercio local.
Sus hermanos dirigen el grupo delictivo Los Rojos, que mantiene el control en la capital guerrerense y son responsables de secuestros, robos, asesinatos, extorsiones, cobro de piso y ejecuciones.