Instituciones sin fines de lucro aportan 2.7% del PIB: Ernesto Monroy

MÉXICO, DF., 13 de noviembre de 2015.- La actividad de las instituciones sin fines de lucro genera 2.7 por ciento del Producto Interno Bruto (PIB), lo que genera actividad y energía social, dijo el titular de la Unidad Coordinadora de Vinculación y Participación Social de la Secretaría de Salud, Ernesto Monroy.

La aportación económica, que alcanza los 180 mil millones de pesos, equivalente a lo que aportan las industrias del pan y las tortillas, sumada a los temas en los que trabajan las organizaciones de la sociedad civil son necesarios para establecer una agenda entre ellas y el Gobierno, dijo el funcionario a Quadratín, luego de su participación en el seminario Construyendo lazos para el fortalecimiento institucional de las organizaciones de la sociedad civil, organizado por la Fundación Pfizer.

“Para nosotros es muy importante entendiendo que a través de la sociedad civil podemos entender las necesidades emergentes de la sociedad que a través de sus organizaciones deben establecer la agenda pública, porque además esta actividad de las instituciones sin fines de lucro en México (genera) el 2.7 por ciento del PIB.

“Es decir, hay una gran actividad y energía social en torno a esto y lo que tenemos que hacer es ponernos a la orden para lograr vincularnos y resolver los problemas, no sólo que se establezca la agenda sino también las vías de solución para resolverlos”, expresó.

-¿Ayudan las organizaciones sin fines de lucro a mover a México?

-Exactamente, lo acaba de decir con puntualidad. Se trata de coordinarnos con esta fuerza social que mueve a México, no solo que diga que el gobierno debe poner atención en el tema de los embarazos adolescentes o el tema de trasplantes renales o el cáncer cérvico uterino y hay gente que dice ‘quiero ayudar’ y por eso estamos aquí, con la idea de vincular -contestó.

Dijo que las organizaciones sin fines de lucro muestran temas de relevancia para la sociedad y el gobierno, porque quienes forman las organizaciones viven los problemas en carne propia o por sus seres queridos.

“Muchas organizaciones son de gente que ha padecido en su familia que entiende con claridad cuál es el sufrimiento y por lo tanto se organizan y nosotros tenemos la obligación de acompañar”, señaló.