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MÉXICO, DF, 29 de junio de 2014.- México no se quedará impasible ante la tragedia de los niños migrantes, y el comisionado nacional para la Seguridad, Monte Alejandro Rubido, ha anunciado que reforzará las medidas para reducir el flujo de menores que intentan cruzar la frontera con Estados Unidos, destaca el prestigiado diario español El País.
Rubido admitió que el «sellamiento» de la frontera no es posible, pero aseguró que el gobierno mexicano va a aumentar sus controles en líneas férreas y pasos fronterizos. Paralelamente tratará de reducir los riesgos de la travesía migratoria para los niños, un recorrido donde los secuestros, extorsiones y violaciones son frecuentes, destaca El País.
«Los grupos delincuenciales están aprovechando este incremento del tráfico humano para lucrarse y también para reclutar a menores para sus organizaciones», indicó.
El sur del Río Bravo es, en muchos puntos, un avispero, donde el poder de los carteles, que controlan la droga y el tráfico de personas, impone su ley, señala el periódico español
En la línea de fuego destaca el estado de Tamaulipas. La zona, un corredor natural de los migrantes y de los cargamentos de droga hacia Estados Unidos, se ha convertido en uno de los más salvajes de México.
Con 17 pasos fronterizos, cinco aeropuertos internacionales y tres puertos es una codiciada plataforma de operaciones de las bandas criminales, cuyo peso, bajo la amenaza del plomo, ha alcanzado tal dimensión que en muchos puntos sobrepasa al de las autoridades locales. Ciudades como Reynosa o Tampico viven atemorizadas y con constantes persecuciones y tiroteos.
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