Fotos: dan fans último adiós a Silvia Pinal; Bellas Artes, de luto
MÉXICO DF, 16 de octubre de 2014.- Con total ausencia de senadores del Grupo Parlamentario del Partido Revolucionario Institucional, la tarde de este jueves el Senado de la República recibió al director cinematográfico, Luis Estrada, quien presentó su más reciente largometraje, La Dictadura Perfecta, filmé que fue calificado por los legisladores como una caricatura deprimente y espeluznante, que dejó en los asistentes un agridulce ‘sabor de boca’.
En una proyección que duró más de dos horas, el auditorio Octavio Paz de la Cámara Alta que fue acondicionado como sala de cine, estalló en aplausos en más de una ocasión, dando paso a risas estridentes de los asistentes que pasaban de la euforia a la tristeza de la realidad retratada.
En un intercambio de ideas al termino el filme, el productor reveló a los asistentes que su proyección a nivel nacional ha causado incomodidad en algunos sectores de la sociedad, por lo que advirtió que en caso de sentir algún tipo de riego a su integridad acudiría al Senado a denunciarlo.
«Hay mucha gente que está muy enojada con la película y con los que la hicimos y de pronto se oyen cosas como que todo aquel que pudo haber impedido que la película se hiciera y no lo hizo se va a ir, por lo que les pido que me acompañen y no se permitan atropellos de ese tipo, pero si alguna vez me siento amenazado vendré aquí a denunciarlo», sentenció el cineasta.
Por otro lado, destacó que aunque se trata de una historia ficticia, muchos de los acontecimientos y secretos de los ‘tejes y manejes’ del poder le han sido filtrados en algún momento de su carrera, sin embargo hasta este momento encontró las condiciones para exponerlo en una cinta cinematográfica.
Pese a que los hechos parecieran que fueron escritos hace algunas semanas, el director y escritor aclaró que el guión terminó de escribirse a finales 2011, cuando la elección presidencial aún no siquiera de llevaba a cabo, por lo que dijo, es una desgracia que el país se vuelva tan predecible.
«Esta crisis que asoma la película, económica al final empieza a asomarse y lo que más me asombra es que fue como una predicción, incluido el anuncio de la visita del Papa Francisco», relató el creador a los asistentes.
Ante dicho panorama, el senador panista Francisco Búrquez Valenzuela, se manifestó perfectamente identificado con los personajes políticos y reconoció que ‘el país se nos está desmoronando’.
«Los que estamos dentro de la política no somos tontos y vemos como el país se nos está deshaciendo en las manos y todos somos culpables», expresó el legislador, ante lo que exhortó a los ciudadanos a involucrarse en la política, ya que los funcionarios, subrayó, todo lo que tocan lo pervierten.
Por su parte, el legislador baja californiano, Ernesto Ruffo Appel, acotó que el filme dejó en su persona una profunda tristeza por ser tan cercano a la realidad, aunque dijo, de vez en cuando hace bien reírse de si mismos para entender sus contradicciones y sentar bases y principios constructivos.
En su oportunidad el coordinador del PT en el Senado, Manuel Camacho Solís, señaló que la película es un acto de valentía al tocar temas centrales para encarar al poder, hecho que requiere un verdadero valor civil y reiteró que como la película lo dice, vivimos en una dictadura mediática que se ha convertido en el instrumento más brutal de la democracia.
«Lo que narran aquí es cómico y tráfico, es la verdad, este país está dominando por la televisión de una manera antidemocrática que sostiene al poder… Cada problema político que vemos en la realidad es manipulado desde la televisión», arremetió el legislador y ex priísta.
En este marco la senadora capitalina, Alejandra Barrales, aplaudió el impulso de los creadores de la película a la libertad de expresión y la calidad del cine mexicano.
Por último la organizadora del evento, Layda Sansores, reveló estar sorprendida de la apertura del Senado de la República para recibir la película, ya que hasta horas antes de la presentación del largometraje creyó que en cualquier momento sería cancelado.
«Nos dimos a la tarea de desafiar lo que creímos sería una guerra contra la censura y fue una sorpresa porque no solamente no nos pusieron obstáculo, sino que la Mesa Directiva hasta pagó la pantalla, fueron solidarios y no pusieron condiciones», reconoció la senadora, quien lamentó la ausencia de sus homólogos tricolor.
Con los ánimos esperanzadores de un mañana mejor, el encuentro concluyó con el llamado del actor Damián Bichir, protagonista de la película a encontrar con vida a los normalistas de Ayotzinapa desaparecidos, mientras Daniel Giménez Cacho sostenía una pancarta exigiendo justicia para los estudiantes de Guerrero.