Poder y dinero
La reforma fiscal aprobada en 2013 para el presente ejercicio fiscal, hoy ve un intento porque las cosas guarden de alguna manera el estado en que se encontraban antes de la aprobación del paquete fiscal; diversos diputados de filiación panista han presentado ante la Cámara de Diputados una iniciativa de ley en uso de sus atribuciones, mediante la cual pretenden que el Congreso General la apruebe y se logren los siguientes puntos:
1. La reducción del Impuesto Sobre la Renta (ISR) a personas morales del 30 % al 28 %; esto es, regresarlo a como estaba para incentivar la inversión en el sector productivo.
2. La deducibilidad al 100 % de activos fijos; actualmente las empresas del país se han visto afectadas ya que utilizaban la deducción inmediata de inversión no sólo como un estímulo fiscal, sino también como una oportunidad de financiamiento para el desempeño de sus actividades.
3. La eliminación del gravamen en 1 peso por litro a las bebidas azucaradas; este impuesto se creó bajo pretexto de salud pero no ha habido resultado ni baja en el consumo, lo que sí bajó fueron las ventas de los productores de azúcar y mientras las trasnacionales han encontrado otros caminos, es a los productores nacionales de azúcar a los que se les ha afectado de manera considerable.
4. Exención del Impuesto al Valor Agregado (IVA) al transporte foráneo; esta medida fue implementada el año pasado y se afectó a todos aquellos que trabajan o estudian en municipios distintos a donde viven ya que los ingresos reales de los ciudadanos se han visto mermados porque ahora el estudiante o trabajador que debe trasladarse de un municipio a otro tiene que pagar 16% más del precio que establece el medio de transporte que utiliza; era evidente que no era un sobreprecio que asumirían los transportistas.
5. Regresar el IVA en la frontera al 11 %; hoy, a causa del incremento en la tasa del IVA en la zona fronteriza, existe un efecto Inflacionario recesivo y de baja competitividad resultado de las fugas de consumidores y las transferencias de ingresos hacia mercados externos; aunado a que más de 7.5 millones de ciudadanos que radican en la frontera norte del país, sufrieron un aumento del 45 % en la carga fiscal (6.6 % de la población nacional), considerando que toda la carga económica se transfiere al pago del impuesto y a quien incide es en el consumidor final.
En el año 2010 diversos legisladores de filiación priísta anunciaban con bombo y platillo que no aprobarían la creación de nuevos impuestos ni el incremento de sus tasas, al paso del tiempo el ideario cambia, aspiramos a que no sólo sea en un afán de campaña la iniciativa, que verdaderamente sea un servicio a los gobernados, pero también ellos mismos tienen sus historia, cuando aprobaron aquel apartado de condonar créditos fiscales, donde una de las televisoras nacionales se vio finalmente beneficiada.