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MÉXICO, DF, a 20 de mayo de 2015.- El gobernador de Guerrero, Rogelio Ortega, reconoció que los problemas acumulados que se dieron en el Estado estuvieron fuera de su gestión y que le tocaron lidiar con ellos.
En entrevista al término de la presentación del 7 Foro Nacional para la Seguridad y Justicia, el funcionario aseguró que los eventos registrados en Chilapa son localizados así como gran parte de la Tierra Caliente.
Sin embargo reconoció que todos esos sucesos no son en su completa responsabilidad.
“Es una realidad que no podemos olvidar, parte de la tragedia de Iguala es eso también de la filtración del crimen en las instituciones a mí me tocó gobernar Guerrero frente a una situación tan dramática como esta, los esfuerzos que hemos realizado es tratar de inhibir con poco más de 12 mil elementos del Ejército en un operativo llamado Tierra Caliente, que va desde Michoacán hasta la frontera con Chilpancingo, que abarca a todos los municipios de Tierra Caliente.
“Chilapa es un foco localizado y el otro tramo de Teloloapan pasando por Arcelia que son las zonas de mayor conflictividad y atendemos junto con la Federación. Son problemas acumulados que a mí me tocó lidiar con ese toro”, aseguró.
Comentó que la disputa del territorio en Guerrero se ha dado desde hace años y esto ha colocado que se instalen focos rojos en las comunidades más peligrosas para las elecciones.
“Hay regiones donde la delincuencia organizada, desde hace años, tiene presencia, se disputan territorios y son lugares donde debemos tener un blindaje especial para que el proceso electoral se realice sin ningún contratiempo.
“En algunas localidades que consideramos focos rojos por la presencia delincuencial o porque el conflicto que detonó la tragedia de Iguala permanece ahí los reclamos de rezagos sociales y debemos tomar medidas especiales que garanticen a la ciudadanía emitir su voto”, dijo Ortega.
Finalmente, el gobernador reconoció que su Estado de convirtió en una zona de disputa territorial entre el narcotráfico.
“Lo que podemos decir es que en Guerrero, al igual que otras entidades del país, se convirtió en espacio de disputa territorial entre bandas delincuenciales vinculadas al narcotráfico”.