Mi gobierno respeta el derecho de manifestación: Graco Ramírez

CUERNAVACA, Mor. 25 de marzo de 2014.- Yo respeto todas las manifestaciones. Son totalmente respetadas, son expresiones que pueden representar, evidentemente, el malestar de una porción de la ciudadanía, pero no es el todo, yo te puedo decir que sólo es una parte, indicó el gobernador Graco Ramírez al ser cuestionado sobre la anunciada marcha del uno de abril.

El mandatario agregó que la mayoría de organismos empresariales de Morelos, si no es que todos, la sociedad misma está en una lógica diferente.

Respecto al supuesto “boicot” a la marcha del domingo aclaró que las actividades de Morelos Único (para lo cual se montó una exposición en el zócalo) concluyen el domingo 30 de marzo, mientras que el concierto de Julieta Venegas está programado desde hace meses para el 2 de abril, por lo que el martes uno, la plaza Emiliano Zapata de Cuernavaca «estará libre».

En el mismo tema, Graco Ramírez respondió sobre los avances del Mando Único:

El integrar los mandos directamente al gobierno del estado, fue un acuerdo con todos los alcaldes. Están integrados ya más de la mitad de los municipios del estado, los más importantes, que representan el 85 por ciento de la población y trabajamos bajo esa estrategia, al frente de la cual está Alberto Capella, un policía experimentado que estuvo en Tijuana y dio resultados que ahora empezamos a tener en Morelos.

El gobernador indicó que la depuración de los cuerpos policiacos es permanente, por lo que el 85 por ciento de policías están ya certificados en todo el estado, a fin de contar con policías aptos que estén del lado de los ciudadanos, como no ocurrió lamentablemente durante 18 años en administraciones pasadas, principalmente, en los municipios conurbados de Cuernavaca.

Ramírez mencionó la importancia económica del gasoducto y la termoeléctrica de Huexca y, en el rubro turístico, la ampliación de los cuatro carriles del tramo La Pera-Cuautla y refirió que en la realización de estos proyectos siempre hay grupos minoritarios que los rechazan, pero no por ellos se dejan de hacer; como tampoco de avanzar en materia de seguridad.