Transparencia, el reto de la transición al Inegi y la reforma necesaria
MÉXICO, DF, 7 de enero de 2015.-El legendario periodista mexicano Julio Scherer García, fundador de la revista Proceso, en 1976, murió este miércoles de un choque séptico.
Llevaba poco más de dos años enfermo, principalmente de problemas gastrointestinales. En abril, cumpliría 89 años, informa el portal de la revista.
El 17 de octubre pasado visitó por última ocasión la redacción que tanto amó. La familia informó que las exequias serán privadas.
Al despedirse, a las puertas de las oficinas del semanario que fue su vida durante sus últimos 38 años, dijo a este reportero, los ojos húmedos, que Proceso había costado muchos sacrificios y trabajo y se despidió intentando una sonrisa, narra el periodista Alejandro Caballero.
“Prometió, un hilo su voz, que regresaría para el aniversario 38 del semanario. Ya no pudo.
“Siempre lejos de los reflectores, renuente a las entrevistas, fiel a su estilo de vida, sus funerales serán privados”, recuerda Caballero.
Al inicio de la década de los 40 del siglo pasado, antes de cumplir los 18 años, Scherer García ingresó al diario Excélsior. Tuvo una carrera fulgurante. Inició como mandadero de la redacción y unos días antes de cumplir los 22 ya publicaba en el vespertino Últimas Noticias y un año después en el diario, en cuyas páginas se pueden encontrar notas, entrevistas y reportajes bajo su firma, de septiembre de 1949 a abril de 1976.
Scherer García fue director de Excelsior, diario que en el conflicto de 68 fue el único medio mexicano que cuestionó en su momento la matanza de Tlalteloclo y en 1976 sufrió el llamado «golpe de estado a Excelsior» que le dio el entonces presidente Luis Echeverría, cuestionado por el diario desde las páginas editoriales. Escribió 25 libros y su amistad con Gabriel García Márquez fue legendaria.
Uno de los libros predilectos de Scherer fue Pedro Páramo, de Juan Rulfo. Paradojas de la vida, el periodista murió en la misma fecha, 29 años después, que el inmortal escritor mexicano, y a un mes tres días del fallecimiento del escritor Vicente Leñero, con quien fundó la Revista proceso, en el 76, cuatro meses después del golpe a Excelsior.