Para entrar al clóset… de mis amigas

MÉXICO, DF, 19 de noviembre de 2014.- Con el propósito de generar un nuevo estilo de consumo “en el que todos ganen” -incluido el planeta- y con una visión de género y filantrópica, la empresaria colombiana Olga Lucía Gallego creó El Clóset de mis Amigas, una plataforma comercial dirigida principalmente a mujeres.

Se trata de un círculo exclusivo en el que las dueñas de ropa y accesorios de reconocidas marcas pueden venderlos a un precio mucho menor al que fueron adquiridos y así “gana la proveedora, porque recupera  parte de la inversión en artículos que ya no vuelve a usar y prácticamente están nuevos, y gana la consumidora, al adquirir un producto de alta calidad, en condiciones impecables y a un costo mucho más accesible”.

Además, gana el medio ambiente “al generar conciencia sobre la reutilización de productos y generar menos desechos” y los Hogares Infantiles San Martín de Porres y Juan XXIII, los cuales tienen bajo su cuidado a 80 niños en situación de orfandad, abandono y maltrato físico, y son beneficiarios de un porcentaje de las ventas de El Clóset.

Entre los apoyos que El Clóset de mis Amigas dará a las misioneras dominicas de Texcoco, responsables de los hogares infantiles, se encuentra la realización de un bazar trimestral (el primero se llevará a cabo en febrero del próximo año), donde el cien por ciento de las ventas se destinará a dichos albergues.

Proveniente de una familia de mujeres trabajadoras y con una carrera centrada en la formación de mujeres empresarias, Olga Lucía visualiza El Clóset de mis Amigas como un instrumento de empoderamiento femenino, pues permite a las mujeres convertirse en proveedoras y generar un ingreso propio que las dote de independencia y autonomía. “Es una transformación”, asegura la especialista en marketing en entrevista exclusiva con Quadratín México.

La calidad de los productos que se comercializan así como la confidencialidad de quienes participan está garantizada.

“Hay un proceso de selección, evaluación y autentificación de las prendas para garantizar al consumidor final la calidad de su compra”, sostiene.

Además, “nadie sabe quién vende ni quién compra. Hay un perfil particular para ser proveedora y sólo se puede entrar mediante referencia”.

La página web (www.elclosetdemisamigas.com), explica, es muy sencilla con el fin de que se pueda navegar fácilmente en ella. Las formas de pago (paypal o depósito bancario) también buscan dar certidumbre y confianza a las clientas, quienes reciben en su casa el pedido, debidamente embalado.

Es, tal cual, el clóset de un círculo de amigas, cuya apuesta es desarrollar un mercado electrónico que permita el reestreno de ropa y accesorios de marcas de lujo, en perfecto estado y con un costo hasta 50 por ciento menor al punto de venta.