Cobija Alerta Roja a 4 alcaldías de CDMX
MÉXICO, DF, a 2 de abril de 2015.- En la representación de la Pasión de Cristo en Iztapalapa caben todos. Los religiosos, los curiosos, los vecinos, los fuereños, los vendedores, los policías, los trabajadores de la delegación y los del Gobierno del Distrito Federal (GDF).
En la 172 representación de la Pasión de Cristo “Tradición con orgullo y valores”. Las novedades apenas modificaron el guión. En el primer año sin ley seca, no se veía a personas afectadas por el alcohol, aunque había algunos puestos que vendían los famosos jarritos cuyo contenido de michelada es casi receta obligada para enfrentar el calor.
Tampoco afectó la lluvia que comenzó a caer poco antes de las 17:00 horas, y que no modificó la procesión que nazarenos y apóstoles hacen por los ocho barrios de Iztapalapa.
Se registró una modificación en el programa, fue el homenaje para Ángel Juárez Cabrera, legendario constructor de las cruces usadas para representar la crucifixión de Cristo durante 40 años y falleció en enero pasado, en la representación no hay espacio para la improvisación. Es un teatro de masas con un guión definido tras meses de preparación.
Los espectadores saben la historia que será contada, pero al mismo tiempo ven la trama como si no supieran que trata sobre el redentor de la humanidad, de acuerdo con la religión católica.
En cuanto aparecen los soldados romanos, los asistentes toman fotos con sus celulares, y como si con ello ganaran indulgencias, bajan la voz en cuanto aparece Daniel Agonizantes, quien este año encarna a Jesús, con su cabellera de bucles y su barba falsa, pero con una seriedad que desarma cualquier atisbo de burla.
Con la misma seriedad actúan los nazarenos, vestidos de morado, que sonrientes se dejan tomar fotos, pero que a la hora de caminar dolientes por la suerte de Jesús lo hacen descalzos, algo que parece poca cosa si se toma en cuenta que en Viernes Santo deben cargar cruces por las irregulares calles del pueblo.
Tampoco faltan los mercaderes, como los que Jesús expulsó del Templo. Están apostados alrededor de la iglesia, en las calles de 5 de Mayo, en Aztecas, y venden tacos, helados, tortas, hasta coronas de espinas o videos con las representaciones de años pasados.
También están las autoridades, que vigilan que no haya desmanes, que el calor no desmaye a nadie, que instalan baños portátiles, colocan puestos de mando y que como buenos samaritanos regalan agua o naranjas a quiénes se lo pidan.
Se trata de una representación que atrae lo mismo a vecinos de la delegación que a capitalinos de otras demarcaciones, de otros estados, de otros países.
Hombres, mujeres, niños y niñas que se solidarizan o sufren con Jesús, o piden tomarse fotos con él, no sólo para el recuerdo, sino para mostrar su fe católica.
Una representación realizada en el corazón de Iztapalapa, que este Jueves Santo recibió a 300 mil visitantes que fueron a conocer la procesión, algunos acudieron al centro a disfrutar un helado, un refresco mientras ven pasar a hombres y mujeres con vestuario similar al que se usaba en Jerusalén hace 20 siglos.
Otros acuden al santuario del Señor de la Cuevita.
Algunos más se esperan a las 21:00 horas a la representación de la Ultima Cena, donde Jesús anuncia a sus discípulos que uno de ellos lo traicionará, que la Biblia registra que es Judas, a cambio de 30 monedas de oro, y así se escenifica en Iztapalapa.
Luego que Satanás intentó tentarlo del sufrimiento, que en el Jardín de los Olivos Jesús es apresado. Ahí termina el Jueves Santo.
Logística
300 mil visitantes
10 mil 225 elementos policiacos
827 patrullas
200 binomios a caballo
9 ambulancias
7 helicópteros
1 Centro de Mando móvil
2 drones que sobrevuelan la zona