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MÉXICO D.F., 24 de julio del 2014.- La bancada del PAN en el Senado señaló que absorber la deuda por pasivos laborales en Pemex y CFE es del 15 por ciento del Producto Interno Bruto, mientras la deuda total del gobierno es del 120 por ciento del PIB.
El vicecoordinador de temas económicos de la bancada del PAN, el senador Francisco Búrquez, señaló que el estado de las finanzas públicas del país demuestra el manejo poco responsable que han tenido las burocracias gubernamentales a la hora de administrar los bienes públicos.
“No solamente es Pemex y la CFE. Las universidades públicas, el Instituto Mexicano del Seguro Social, entre otras empresas y las burocracias de los tres órdenes del gobierno nos llevan a enormes endeudamientos. En estas dos empresas estamos hablando entre 14 y 15 por ciento del PIB del país. Hablar de todas las demás deudas contingentes implica hablar de 120 por ciento del PIB”, dijo.
“Absorber los pasivos laborales de Pemex y la CFE es algo inevitable. Pero también es muestra del grave deterioro financiero que hasta el día de hoy muestran estas empresas, es muestra del fracaso financiero del modelo”, explicó el senador.
Aunque admitió que reconocer el pasivo laboral de Pemex para fomentar la competitividad de la empresa, Búrquez criticó el hecho de que la ciudadanía sea la que tenga que pagar los “platos rotos” mientras los verdaderos responsables permanecen impunes.
“Pemex y CFE tienen que competir con un piso parejo contra las mejores del mundo y no pueden ir con estos endeudamiento. ¿Pero quién va a pagar los platos rotos? Habría que ver cuánto van a pagar los sindicatos, cuánto Pemex y que los mexicanos paguen la menor parte”, señaló.
Por su parte, el coordinador del PRD en el Senado, Miguel Barbosa, coincidió en que el reconocimiento de la deuda laboral de Pemex tendría que ocurrir tarde o temprano, aun cuando esto no resolverá el problema de fondo.
“Resolver estos pasivos laborales es un incremento enorme a la deuda pública y que al final no resuelve de fondo las relaciones laborales entre Pemex, CFE y los trabajadores. El achicamiento de estas empresas va a provocar despidos, pero vamos a ver cómo operan este reconocimiento de los pasivos laborales, que de entrada a mí me gusta, pero no resuelve de fondo la relaciones laborales porque viene la disminución, la división de las empresas y con ello el despido de miles de trabajadores”, dijo.
“Vemos un pueblo que está en otros temas, que no está atento de los impactos que esta reforma va provocar. Si hubiera una conciencia clara de todo ello tendríamos una sociedad mucho más interesada de estos asuntos”, agregó Barbosa.