Presenta Magdalena Contreras protocolo contra violencia de género
MÉXICO, DF, 2 de abril del 2015.- Vírgenes, nazarenos y apóstoles, estos últimos descalzos, recorrieron los ocho barrios que componen el pueblo de Iztapalapa, sede de la representación de la Pasión de Cristo más famosa en México.
El ‘chipi chipi’ no arredró a las mujeres y hombres jóvenes quienes, de manera silenciosa y respetuosa, caminaron ataviados con capas y túnicas, previo a la escenificación del lavatorio de pies de Cristo a sus discípulos, como símbolo de humildad, y la Última Cena, donde el fundador del cristianismo les anuncia que uno de ellos lo traicionará.
Para el Viernes Santo se espera la visita de más de 2 millones de personas, tanto mexicanas como extranjeras, que atestiguarán el juicio a Cristo, su recorrido con la cruz y su ejecución. Una escenificación con 172 años de historia y que es orgullo de Iztapalapa.