Confían demandantes en reforma laboral ante Monreal
CIUDAD DE MÉXICO, 8 de marzo de 2016.- Es necesario trabajar para erradicar la feminización de la pobreza y lograr trabajo digno y decente para todas las mujeres, aseguró la senadora Angélica de la Peña Gómez.
Durante la sesión solemne para la entrega del reconocimiento Elvia Carrillo Puerto a Rosario Marín, la legisladora del PRD lamentó que a pesar de los esfuerzos realizados, la situación jurídica y social de las mujeres y niñas no ha cambiado y continúa la violación sistemática de sus derechos humanos.
«Todos los días, siete son asesinadas en contextos de violencia extrema; 63 de cada 100 mujeres de 15 años y más han experimentado al menos un acto de violencia de cualquier tipo», informó
De la Peña Gómez señaló que la Ley General para el Acceso de Mujeres a una Vida Libre de Violencia y sus mecanismos no han podido resolver los casos de feminicidios, «y la modalidad de violencia feminicida simplemente es letra muerta en la ley».
«Así acontece con las cuotas y la paridad: las mujeres enfrentan todo tipo de obstáculos, incluidas las amenazas, para impedir que ejerzan el poder de manera genuina, porque son quienes han luchado por estos espacios y sufren violencia política”, aseveró.
La presidenta de la Comisión de Derechos Humanos del Senado afirmó que el cáncer que obstaculiza los derechos de las mujeres es la influencia de patrones socioculturales discriminatorios que se encuentran en todas las esferas del ejercicio del poder público.
Por ello, dijo, no es suficiente con ganar los espacios de poder para las mujeres, sino ver el poder con un sentido diferente al del mundo masculinizado.
«Requerimos deconstruir el poder público para que además de ser ocupado paritariamente, cambien también los patrones estereotipados y discriminatorios de hacer la política», apuntó.
Angélica de la Peña sostuvo que este 8 de marzo se debe hablar de manera diferente e informar a la sociedad de lo que se está haciendo para resolver y prevenir hechos delictivos como la violencia de género, la tortura sexual, la desaparición y la trata de niñas y mujeres, entre otros.