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MÉXICO, DF., 29 de septiembre de 2015.- El senador y ex candidato del PAN a la gubernatura de Colima, Jorge Luis Preciado, acudió al Palacio Legislativo de San Lázaro a pedir apoyo de la bancada de su partido en su recurso de revisión constitucional, que está por resolverse en la Sala Superior del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF), a efecto de que se revierta el resultado de la elección de gobernador de dicho estado, o en su defecto, sea anulada.
Debido a que el PAN acusa de violación a los principios de certeza y legalidad en el pasado proceso electoral del 7 de junio, en causa común el coordinador de la fracción Marko Cortés Mendoza se solidarizó a la que consideran “justa”, para que el voto de los colimenses sea respetado.
El organismo local electoral reportó de 503 votos con los que Preciado Rodríguez ganó la elección a gobernador.
El senador, sin ánimos de alguna toma de tribuna, dijo que acudió en ‘son de paz’ porque tienen la razón jurídica de su lado.
En conferencia de prensa, expuso que después de la elección del 7 de junio el PAN ganó en Colima 10 de los 16 distritos y seis de los municipios más grandes de los 10 que hay; el PRI ganó sólo los dos más pequeños; uno, con 8 mil habitantes y otro, con 10 mil habitantes. “Y con eso dicen que ganaron la gubernatura del estado”, reclamó el legislador de Coquimatlán.
En revisión del proceso electoral, en el primer conteo, el órgano electoral lo dio como ganador por 495 votos; 40 minutos después de sostener una reunión con el secretario General de Gobierno y el representante del PRI Jorge Carlos Ramírez Marín cambió su versión y viró el triunfo al PRI con 503 votos.
Preciado acusó que habían inyectado mil votos de más en la elección. Comentó que en municipios como Ixtlahuacán votó el 95 por ciento de la población, una localidad expulsora de ciudadanos que los manda de migrantes a Estados Unidos.
En la oficina del Registro Civil, sostuvo que sacaron las actas de defunción de 16 muertos, los cuales aparecieron votando el día de la elección.
Denunció la intervención del Gobierno del estado en contra de la campaña de Acción Nacional, donde bajaban los programas de Desarrollo Social.
Los panistas demandan que la elección mínimo debe anularse, no revertirse.
Marko Cortés ve suficientes razones para que no quede en precedente lamentable en la estrenada ley electoral, “necesitamos que el TRIFE haga valer la ley y por lo tanto estaremos pendiente de su resolución”.