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ECATEPEC, Edomex., 5 de enero de 2015.- Las finanzas municipales de Ecatepec deben de ser auditadas por el Órgano Superior de Fiscalización del Estado de México (OSFEM) para detectar si se utilizaron recursos públicos en los viajes internacionales de Rafael Bedolla, hijo del alcalde Pablo Bedolla López.
Esto lo solicitará el diputado Octavio Martínez Vargas, presidente de la Comisión de Seguridad Pública del Congreso local y secretario general del Partido de la Revolución Democrática (PRD) en el Estado de México.
Desde el punto de vista del legislador, resulta indispensable la investigación después de que el propio Rafael Bedolla presumiera a través de las redes sociales, en 2013, que comenzaba el periodo de «vacas gordas» en Ecatepec, y publicara, a partir de entonces, fotografías de múltiples viajes que realizó, entre otros destinos a París, Roma y Cancún, por mencionar algunos.
Dada la coincidencia de estas salidas con sus comentarios en Facebook y la administración de su papá, Martínez Vargas advirtió que resulta necesario y saludable conocer el origen de los recursos con los que viajó Rafael Bedolla, pues en contraste en Ecatepec existen múltiples necesidades, comenzando con la seguridad pública, y es en esas áreas donde los recursos públicos erogados en frivolidades hacen falta.
En caso de confirmarse la irregularidad, detalló el perredista, los recursos utilizados en las salidas deben reintegrarse a la hacienda pública, independientemente de que se hayan configurado y se finquen responsabilidades en otros ámbitos, como el penal o administrativo, pues no se puede descartar la posibilidad de que se haya incurrido en desvío de recursos, aunque eso deben determinarlo con precisión las autoridades competentes.
El diputado por Ecatepec apeló a que su petición sea atendida sin que medien intereses políticos, pues sin ir más lejos recordó que hace unos días Heliodoro Carlos Díaz Aguirre, subdirector jurídico corporativo de Liconsa, renunció tras presumir en redes sociales el auto deportivo Porsche, valuado en 100 mil dólares, que le obsequió su padre Heliodoro Díaz Escárraga, funcionario del Instituto del Fondo Nacional de la Vivienda para los Trabajadores (Infonavit), quien por este mismo escándalo también presentó su renuncia al cargo.