Cae El Cholo Palacios, presunto jefe de plaza de Guerreros Unidos
MÉXICO, DF, 19 de enero de 2016.- Diputados federales del PRD solicitan a la Procuraduría General de la República (PGR) a atraer el caso del asesinato del periodista José Moisés Sánchez Cerezo, quien fuera sustraído el 2 de enero de 2015 por desconocidos que irrumpieron en su domicilio en la comunidad El Tejar, municipio de Medellín de Bravo, Veracruz, y asesinado ese mismo día, según la investigación oficial.
A casi un año del hallazgo del cuerpo del comunicador, la madrugada del sábado 24 de enero de 2015, legisladores perredistas impulsan un exhorto a la Fiscalía General del Estado de Veracruz para que concluya la indagatoria sobre la presunta participación del expresidente municipal, Omar Cruz Reyes, presunto autor intelectual del crimen de Moisés.
Sánchez Cerezo fungía como editor del periódico La Unión, en la entidad jarocha y fue encontrado sin vida en el interior de su casa en la citada fecha; de acuerdo a las pruebas, había sido amenazado de muerte días antes de su asesinato.
Omar Ortega Álvarez y Felipe Reyes Álvarez, del PRD, reprueban que el crimen sigue impune tras un año de ocurridos los hechos, por ello, afirman que el actuar de las Comisiones de Derechos Humanos, nacional y estatal, ha sido pasivo, principalmente en torno al asesinato así como con las denuncias de las violaciones a derechos humanos de los familiares de la víctima.
Coincidieron en que la autoridad competente debe aplicar todo el rigor de la Ley para hacer justicia al asesinato del periodista y manifestaron que las únicas excusas para que no se atienda el caso son la indiferencia y la complicidad.
Ortega Álvarez dijo que la impunidad no puede continuar imperando en Veracruz y enfatizó que el gobernador Javier Duarte debe garantizar la vida e integridad de las personas, particularmente de las que ejercen el periodismo.
Agregó sobre la necesidad de que en Veracruz se apliquen las acciones pertinentes para prevenir y sancionar cualquier acto que violenten libertades como personal, de expresión y del ejercicio periodístico.
En su momento, el crimen de Moisés Sánchez sacudió al gremio periodístico y a la sociedad en general al convertirse en el periodista número 16 asesinado en Veracruz desde el año 2000, por lo que los perredistas consideraron no puede quedar sin castigo y la PGR debe intervenir como instancia federal.
Los legisladores lamentaron que en Veracruz continúen dándose asesinados al gremio periodístico así como intimidaciones y ataques a medios de comunicación, lo que ha generado que sea una de las entidades más peligrosas de México para ejercer la profesión.
Ambos se comprometieron a seguir impulsando políticas públicas incluyentes para erradicar este grave problema social.