Poder y dinero/Víctor Sánchez Baños
Como se ha incrementado el número de personas que llegan a la tercera edad, hay más padeciendo enfermedades degenerativas; y hoy existe también, mayor información sobre los efectos negativos de muchos medicamentos; que además, suben a cada rato de precio.
Por todo eso y porque queremos vivir en forma menos tóxica, está creciendo el interés en las formas alternativas de curación; entre las que está, el uso de plantas.
Es por eso interesante el descubrimiento que indica que consumir maíz azul, tiene efectos benéficos en Alzheimer y ciertos tipos de cáncer.
Lástima que sólo el siete por ciento de los maíces cultivados en México tengan ese color; porque es precisamente en lasantocianinas que le dan el tono azul, donde podría estar la respuesta para combatir las enfermedades crónico-degenerativas, porque sirven como agentes fotoprotectores de la plantas; y también para atraer a los insectos que realizan el proceso de polinización.
Y al ser consumidas, funcionan como antioxidantes que actúan sobre los radicales libres; que como se sabe, son causantes de diversas enfermedades.
Estos hallazgos se deben a Edna Alarcón Aparicio, investigadora del Instituto de Ciencias Básicas de la Universidad Veracruzana, quien desde 2009 ha trabajado sobre las propiedades anti-cancerígenas de ese grano, en colaboración con el Centro Interdisciplinario de Investigación para el Desarrollo Integral Regional del Instituto Politécnico Nacional-Unidad Oaxaca, y la Universidad de Guadalajara.
Sus estudios han tenido resultados muy alentadores, porque fueron capaces de inhibir hasta en un 47 por ciento el cáncer de colón.
En una entrevista con www.imagenagropecuaria.com que me envió mi amiga Elba Pérez, la investigadora explica que los extractos que obtuvo del maíz azul, fueron probados en células cancerígenas de diferentes órganos y a diferentes dosis, con excelentes resultados; sobre todo en cánceres de colón, mama y pulmón; y que en adelante analizará, si una dieta con tortilla azul es inocua y no causa problemas al organismo.
Investigará también, si las antocianinas contenidas en el maíz azul pueden lograr que las personas con Alzheimer recuperen sus funciones; lo que haría reversible la enfermedad.
Otra excelente noticia viene de la Unidad Académica Sistemas Arrecifales Puerto Morelos, que depende del Instituto de Ciencias del Mar y Limnología de la UNAM, donde científicos mexicanos están estudiando las propiedades antitumorales de las anémonas.
Judith Sánchez, investigadora de esa unidad, ha aislado más de 60 polipéptidos de la especie Bunodeopsis globulifera (B. antilliensis) y descubierto que 10 a 15 de ellas, tienen potencial como fármacos contra células cancerosas.
Indaga también otra anémona que ayuda a la liberación de insulina en las células beta, muy útil para el tratamiento de la diabetes.
Estas anémonas marinas abundan en el Caribe mexicano y a nivel experimental han mostrado, que actúan directamente contra células tumorales sin afectar a las sanas.
Sánchez es doctora en ciencias naturales, toxicología y farmacología marina, y está analizando la química de productos naturales marinos, que ha descubierto tienen gran potencial como agentes terapéuticos.
De acuerdo con el boletín de la UNAM que da cuenta de sus progresos, su trabajo consiste en aislar, purificar y caracterizar polipéptidos activos en anémonas y medusas.
Y ha podido identificar en una de ellas, que mide apenas entre cinco y 20 milímetros, 60 a 70 compuestos diferentes; de los que más de 10, tienen actividad antitumoral.
En el futuro ella y sus colaboradores se dedicarán a aislarlos, caracterizarlos y medir su actividad.
Por supuesto no todas las anémonas o sus compuestos, pueden llegar a ser fármacos; y las que sí, deben antes pasar por pruebas de diferentes fases en organismos celulares y en mamíferos pequeños y grandes.
Estudios paralelos son realizados por la doctora Sánchez y un grupo de investigadores del Instituto de Fisiología Celular de la UNAM capitaneados por Marcia Hiriart, en la anémona Aiptasia pallida para comprobar si tiene capacidad para liberar insulina; algo que tiene un muy prometedor futuro para tratar la diabetes.
Y otra muy buena información es que una planta de uso común en todas las casas mexicanas como es el perejil, es capaz de eliminar sal y toxinas acumuladas en el organismo, si se hace con él un té que se toma como agua de uso.
Además de ser diurético y dar salud a los riñones, el perejil mejora el aliento, rejuvenece la piel, fortalece el sistema inmune y depura el cuerpo de grasa excesiva, cura la hipertensión, y previene la osteoporosis, el cáncer, problemas cardíacos, infecciones y cataratas.