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MÉXICO, D.F., 8 de noviembre de 2014.- El regreso de Memo Vázquez al Estadio Azul significó, además de la rivalidad entre Cruz Azul y Pumas o los aires que algunos le dan de ‘clásico’, la vida en el presente torneo ya que el partido entre celestes y auriazules dejó al borde del nocaut a La Máquina, pues el equipo universitario salió con la victoria 0-2, con un gran descuido arbitral en el primer gol felino, en apertura de la acción sabatina de la penúltima jornada del Apertura 2014.
Antes del partido se guardó un minuto silencio por el sensible fallecimiento de Hugo Sánchez Portugal, hijo de Hugo Sánchez Márquez, acaecido este sábado en la colonia Polanco.
Así con un duelo que tenía tintes dramáticos el partido comenzó en punto de las 17:00 horas y no tardó mucho en tener su primeras emociones, y es que en una nueva jugada polémica, Pumas se puso en ventaja ante Cruz Azul con un gol de Javier Cortés, que no debió haber contado.
En el minuto 16, Ismael Sosa desbordó por la banda izquierda y tras llegar a línea de fondo, la pelota había salido, por lo menos 50 centímetros, de la línea final, pero los árbitros del encuentro, encabezados por Ricardo Arellano, no lo vieron y la jugada siguió, Sosa centró para Cortés y éste fusiló a Jesús Corona, que ya había alzado los brazos para reclamar y vio como el balón se colaba en su meta.
Cabe destacar la actuación de los porteros, José de Jesús Corona y Alejandro Palacios, y es que ambos sabían que se jugaban la vida en la presente Liga MX.
Ya en el ocaso del partido, al 87′, Cristian Giménez tuvo dos tiros libres a las afueras del área universitaria pero ‘Pikolin Crouch’ resolvió bien y despejó de puños.
Al minuto 90, y con el Azul volcado al frente, Eduardo Herrera le puso el último clavo a la tumba de los Cementeros. Herrera aprovechó un gran pase filtrado de Daniel Ludueña y definió al costado izquierdo de Corona para seguir soñando con la Liguilla mientras que en el Estadio Azul, hoy, se cantó «¿Cómo no te voy a querer?».
Los Pumas se quitaron la malaria y pudieron vencer en el inmueble de la colonia Nochebuena, al Cruz Azul, por primera vez en cuatro años. Felinos y cementeros se juegan la vida en la última jornada, ambos, con la necesidad de combinaciones de resultados.