Con cédula digital avanza IMSS en la transformación de sus servicios
MÉXICO, DF, 28 de enero de 2015.-
Grisel López Pereznegrón / Quadratín México
MÉXICO, DF, 28 de enero de 2015.- El presidente Enrique Peña Nieto destacó que ante la creciente amenaza de las adicciones, tanto sociedad y gobierno «debemos seguir uniendo esfuerzos» para que los niños y jóvenes no trunquen su futuro por consumir sustancias que dañan su salud.
“Las adicciones son un terrible mal con repercusiones negativas tanto a nivel personal pero también para toda la sociedad, las adicciones acaban con los sueños de quien las padecen y son una fuente de dolor y preocupación para los familiares y seres queridos», dijo.
Al encabezar la presentación del Programa de Prevención y Atención de Adicciones, el mandatario federal compartió que en México, la dimensión del desafío representa que uno de cada tres mexicanos entre 12 y 65 años consume alcohol con patrones de riesgo, existen cerca de 17 millones de fumadores activos y más de medio millón de personas son dependientes de alguna droga ilícita.
Desde la secretaria de Salud, Peña Nieto dio a conocer los 6 ejes de acción que contempla este programa: reforzar las medidas para evitar el consumo de sustancias adictivas; mejorar la cobertura y calidad de los servicios de atención; fortalecer la profesionalización de las personas encargadas de atender este tema; fomentar la investigación científica contra las adicciones; contar con un marco regulatorio moderno y eficiente en materia de adicciones y fortalecer la presencia de México en foros internacionales donde se hable de este tema.
Contempla 150 líneas de acción para evitar que las drogas destruyan la vida de miles de familias mexicanas entre las que destacan: realizar encuentros nacionales; acercar a actividades deportivas y culturales a los jóvenes; crear talleres informativos para padres de familia y evaluar y acreditar la calidad de los servicios de tratamiento.
Ante invitados presentes, el presidente de México compartió que cada año se gasta 61 millones de pesos en la atención de personas con enfermedades derivadas del consumo del tabaco. Por ello pidió a la secretearía de Salud se consigan más espacios públicos libres de humo de tabaco en todo el país.
Al tiempo de pedir también trabajará para extender a las principales ciudades del país el programa Consume sin Alcohol, el cual en la Ciudad de México ha permitido reducir en 30 por ciento las muertes asociadas al consumo de bebidas alcohólicas.
Al hacer uso de la palabra, la secretaria de Salud, Mercedes Juan López para alcanzar el México en paz e incluyente se requieren políticas públicas para fortalecer el tejido social, entre ella el combate y prevención de las adicciones.
En cuanto al consumo de tabaco, la funcionaria federal dio a conocer que tan sólo en 2013 se registró la muerte 44 mil personas, lo que representa 120 muertes diarias debido a enfermedades provocados por el tabaco.
La titular de la secretaria de Salud alertó respecto a la disminución de la edad de inicio de consumo de drogas en México que en ocasiones, dijo, «se da desde los 12 años de edad».
Durante su discurso, el comisionado nacional Contra las Adicciones, Manuel Mondragón y Kalb destacó que instrumentar la política contra las adicciones, la cual reviste vital importancia para el bienestar y salud de los mexicanos, es un factor de trabajo fundamental.
Ante invitados presentes, Mondragón y Kalb aseguró que la Comisión Nacional Contra las Adicciones renueva y amplía sus atribuciones: información, difusión, tratamiento, investigación y formación de recursos humanos son ya aspectos esenciales de su actuación. Pero enfatizó que la prevención será la piedra de toque de la política pública que se va a impulsar.
«La Comisión Nacional contra las Adicciones está determinada y comprometida con la directrices del señor presidente de la República en materia de salud, sabemos que a través del trabajo conjunto y la suma de esfuerzos encontraremos los mejores caminos para superar juntos sociedad y gobierno el fenómeno de los adicciones», puntualizó.