Denuncia oposición que Morena legisla por medio de fe de erratas
CIUDAD DE MÉXICO, 3 de mayo de 2016.- El PRD en la Cámara de Diputados alertó sobre la posibilidad de que los lineamientos que prohíben la venta de comida chatarra, tanto en el interior como fuera de los planteles educativos, se conviertan en letra muerta ante los altos índices de obesidad y sobrepeso en estudiantes de nivel básico, por ello, “propondremos a la Comisión Permanente un Punto de Acuerdo para exhortar a las Secretarías de Educación Pública y de Salud, del gobierno federal, a realizar una evaluación sobre el cumplimiento del Acuerdo que establecen los Lineamientos Generales para el Expendio y Distribución de Alimentos y Bebidas Preparados y Procesados en las Escuelas del Sistema Educativo Nacional, y hagan públicos sus resultados”, informó la diputada Maricela Contreras Julián a través de un comunicado.
Los malos hábitos alimenticios y la creciente oferta de productos de alto contenido calórico, conocido como comida chatarra, han derivado de manera alarmante en el aumento de casos de personas con sobrepeso y obesidad en México.
“Particularmente, es en la población infantil y en el ámbito escolar donde se encienden los focos rojos pues es de todos conocidos que diversas organizaciones han declarado que nuestro país tiene el mayor número de niños con obesidad en el mundo, por lo que se ha declarado una pandemia que hace propensos a los menores a desarrollar enfermedades crónicas, como la diabetes mellitus, cardiopatías y cáncer, las tres principales causas de muerte en nuestro país”, afirmó la legisladora.
“Hasta hoy se han realizado diversas acciones para solucionar la epidemia del sobrepeso y la obesidad, así como el expendio y distribución de alimentos y bebidas preparados y procesados en las escuelas del Sistema Educativo Nacional; sin embargo, la Organización El Poder del Consumidor ha señalado que, a pesar del lanzamiento de esa estrategia, muchas escuelas que no tienen conocimiento de esta regulación, por lo que no la aplican”.
La integrante de la Comisión de Derechos Humanos acotó que “el propio Gobierno Federal, a través del Instituto Nacional de Salud Pública (INSP), en su último reporte de seguimiento de los lineamientos en 2014, señala que de 110 escuelas primarias públicas revisadas, 80% aún se vendían bebidas azucaradas, y solo una tercera parte contaban con bebederos de agua, como marca la estrategia; además hasta 80 por ciento de los directores, profesores, vendedores de alimentos y padres desconocía que existiera la prohibición de vender comida chatarra”.
Datos de la Encuesta Nacional de Salud en los Escolares, elaborada por INSP, indican que un niño tiene cuatro veces más posibilidades de encontrar en la cooperativa de su escuela un dulce que un vaso de leche o verdura. Afirma también que esos establecimientos priorizan en su oferta productos altamente calóricos, ya que 81 por ciento de las cooperativas de las primarias en el país ofrecen dulces, 78.8 por ciento botanas industrializadas, 71.8 por ciento refrescos y 48 por ciento pastelitos industrializados.
En contraste con estos datos, sólo 50 por ciento vende agua pura embotellada, 29 por ciento yogurt, otro 20 por ciento verdura fresca y sólo 19 por ciento leche.
“Los esfuerzos han sido muchos, recientemente en febrero de 2016 se dio a conocer el modelo de perfil de nutrientes de la Organización Panamericana de la Salud, que consideramos una herramienta que permite identificar los alimentos y bebidas procesados y ultraprocesados con altos contenidos de azúcares, grasas totales, grasas saturadas, grasas trans y sodio, debido a que son los nutrimentos identificados que se han asociado con daños a la salud y que es necesario limitar su consumo”, concluyó.