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MÉXICO, DF., 2 de octubre de 2015.- El subsecretario de Derechos Humanos de la Secretaria de Gobernación (Segob), Roberto Campa Cifrián, aseveró que el Gobierno federal no comparte las conclusiones de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH), que afirmó que existe en México una crisis generalizada y sistemática de derechos humanos.
«Es un informe previo que no refleja la situación del país, sino que se circunscribe a zonas y regiones donde tenemos enormes retos y se tratan particularmente en el caso de Guerrero, de zonas donde tenemos los principales retos como país», afirmó el funcionario federal.
Esto luego que la CIDH, en su visita de cinco días por nuestro país, constató en terreno la grave crisis de derechos humanos que vive México, caracterizada por una situación extrema de inseguridad y violencia; violaciones, desapariciones forzadas, ejecuciones extrajudiciales y tortura; niveles críticos de impunidad y una atención inadecuada e insuficiente a las víctimas y familiares.
En este sentido agregó que es imposible que en sólo cinco días en el país y mediante entrevistas y reuniones en únicamente seis entidades de las 32 que conforman el país, la CIDH haya podido conformar una radiografía general del estado que guarda México en materia de derechos humanos.
«Las observaciones tienen como base sólo la visita a cinco entidades federativas y la ciudad de México, si bien algunos casos se han presentado en situaciones preocupantes no refleja la situación generalizada del país ni el ánimo de intercambio de información entre autoridades y los delegados de la CIDH y los avances en cada materia», precisó Campa Cifrián.
Al ser cuestionado sobre los dichos de Rose-Marie Belle Antoine, presidente de la CIDH, en torno a que el caso Ayotzinapa, de que «no es un caso aislado, sino un patrón que describe la grave crisis de derechos humanos en México», Campa Cifrián descartó por completo dicha aseveración.
«A todas luces el caso a es una situación extraordinaria no hay posibilidad de compararla y no podemos decir que es una situación generalizada, por distintas características y razones se trata de un hecho extraordinario», recalcó el subsecretario de Derechos Humanos de la Segob.
Campa Cifrián adelantó que el estado mexicano estará atento a la entrega del informe definitivo que hará la CIDH el primer semestre de 2016 y «una vez que hayan procesado a plenitud la información que autoridades proporcionaron».