Se ganan la vida y festejan en un mismo acto

MÉXICO, DF, 16 de septiembre de 2014.- Gregorio es papá soltero y tiene dos hijos. Su celebración del 15 y 16 de septiembre fue en la esquina de Paseo de la Reforma y la Glorieta de Colón, al pie del Hotel Fiesta Americana.

Vestidos como “payasitos de crucero”, estos tres mexicanos esperan recaudar dinero justo en esta avenida, minutos antes de que quede cerrada completamente por el paso de vehículos militares, en el marco del Desfile que conmemora la gesta de la Independencia de México.

“¿Qué hicimos ayer?, trabajar hasta las siete de la tarde, porque nos cerraron la avenida para los festejos, comimos tamales oaxaqueños, chiquitos y baratos, pero bien mexicanos, para no quedarnos fuera de las celebraciones.

“Nos acostamos temprano, porque hoy teníamos que llegar bien tempranito para ganarle a los polis y no nos cerraran la avenida, porque si no, hasta después de las dos de la tarde podemos ganarnos un varito”, comentó “Goyito”.

Sus dos hijos, Paco (13) y Quique (7) lo acompañan a cualquier cruce para ganarse la vida, pues su mamá falleció hace un par de años, cuando fue embestida por un auto en el cruce de Reforma e Insurgentes, por lo que Gregorio tuvo que hacerse cargo de los menores, que a su vez dan la cara por ellos mismos, aunque parcialmente oculta por un ralo maquillaje.

Ambos van a la escuela por la tarde y en las mañanas ayudan a su papá a trabajar en las calles como payasitos. Cuando los niños están en clases, Gregorio se dedica a vender chicles en Insurgentes y el Eje 2 Norte, a unos pasos de su casa y colegio de sus hijos.

“Pues podría decirte que todos los días ando en la calle, ellos (sus hijos) los mando a la escuela para que no se dediquen a esto toda la vida, es triste, la mera verdad. No quiero que vean mi ejemplo de cómo ganarse la vida, mejor que vean lo que hago por ellos.

“Ahorita andamos desvelados, mira al Paco, ya mejor se durmió en este inter en lo que pasan los soldados, a Quique ahorita lo llevo a que vea los carros y los aviones, a lo mejor nos alcanza el Paco, pero mientras ya nos ganamos, por lo menos, para comer hoy, si salió para la chuleta”, dijo.

La jornada de trabajo para este 16 de septiembre de estos tres payasitos, concluirá a las cinco de la tarde, ya que los niños tendrán que terminar su tarea y mañana, volverá a ser otro como otros.