
Planea Infonavit reducir tasa de interés a un millón de derechohabientes
MÉXICO, DF, 11 de febrero de 2015.- La Red Unidos en Defensa de la Ciudad de México denunció que los megaproyectos como las líneas de trenes suburbanos, supercarreteras, segundos pisos, e incluso la aprobación de la Norma 26 de vivienda de interés social, significan la concentración de poder económico en pocas manos, que deciden el destino de muchas personas.
Su vocero, Miguel Valencia dijo que las inversiones de los megaproyectos quedan en pocas manos, ya que por la cantidad de recursos que se requieren para construirlos, son pocos los inversionistas los que participan, y al concentrar dinero, terrenos, espacios, centros comerciales y viviendas, también deciden el destino de miles de familias, e inciden en política.
“Entre los efectos de las grandes inversiones queda el poder en pocas manos que deciden quién debe ser diputado”, dijo Valencia, cuya organización agrupa a otras organizaciones como Suma Urbana y Vecinos Unidos.
Valencia, quien por su convicción ecologista no utiliza celular, expuso que los grandes proyectos de miles de viviendas impulsados por Enrique Peña Nieto desde que era gobernador del estado de México buscaba atraer gente a la entidad e incluso incrementar el número de votos para el Partido Revolucionario Institucional (PRI).
“Lo que quieren con los megaproyectos es la concentración de votos en el valle de México que les permita seguir ganando. Es su reserva de votos”, explicó en conferencia de prensa en un restaurante de la colonia Roma.
Dijo que el megaproyecto del Nuevo Aeropuerto de la ciudad de México (NAICM) es un ejemplo, ya que dañará a la flora y fauna de la región, transformará el entorno al recibir a personas que no vivían ahí y expulsar a los más pobres, y concentrará recursos para muy pocos, los que cuenten con grandes fortunas.
En el caso de la Norma 26 que actualmente está a discusión en la Asamblea Legislativa del Distrito Federal (ALDF), que entre otros aspectos podría incluir la posibilidad de construir edificios en pueblos originarios. De aprobarse, se perderían las características de dichos lugares, llegaría turismo, nuevos pobladores, nuevos negocios y se expulsaría a otros, por ello es que se oponen.
Otro megaproyecto es el de la Magdalena Mixhuca, que de ser un espacio deportivo popular como lo pensó su fundador Jesús Martínez “Palillo” se ha convertido en un espacio deportivo profesional para lo cual se han tumbado árboles para el nuevo estadio de béisbol de los Diablos Rojos del México y las adecuaciones al Autódromo de los Hermanos Rodríguez para la realización de la Fórmula 1 en noviembre.
Lamentó que de 20 hectáreas originales ahora sólo son 70.
Otros megaproyectos que amenazan espacios naturales son la Torre que se proyecta en la Barranca de Tecamachalco, y una zona habitacional en la Barranca de Tarango, dijo por su parte el activista Eduardo Farah.
Tanto Valencia como Farah consideraron que la Secretaría del Medio Ambiente del DF, Tania Müeller es la primera enemiga del medio ambiente, y reprocharon que los árboles que se han tumbado para la construcción de las líneas de Metrobús no se han recuperado.
“Cómo es posible que Tania firma tanta tala de árboles. Está de acuerdo con los megaproyectos”, lamentó Valencia.
Dijo que otro enemigo de la naturaleza y que facilita los megaproyectos es el Partido Verde Ecologista de México (PVEM), ya que ha diseñado una regulación ambiental que flexibiliza las mediciones de impacto ambiental, y hace aparecer que las construcciones no son tan nocivas como en realidad sí lo son.
Valencia es un veterano activista defensor de la naturaleza. Recordó que desde 1992 defendió el espacio de la Magdalena Mixhuca, cuando ahí se pretendió construir el estadio del equipo Cruz Azul.
Otro ejemplo de su lucha se dio en 2008, cuando advirtió al entonces jefe de gobierno del DF, Marcelo Ebrard que la Línea 12 no era viable, ya que cada kilómetro costaría 100 millones de dólares, pero Ebrard se empeñó, buscó la opción más barata de trenes, a la empresa española CAD, conocida por su historial de irregularidades, y ahora ahí están los resultados, dijo.
El presidente de la Red en Defensa de la Ciudad de México anunció que el domingo 15 de febrero a las 11:00 horas harán otra protesta por los árboles talados en la Magdalena Mixhuca.