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TAXCO, Gro.,4 DE octubre del 2014.- Para formar un triángulo perfecto, una excursión en Taxco, Guerrero, la capital mundial de la plata, complementa una experiencia turística sin precedentes en el país.
A menos de tres horas del Puerto de Acapulco, los visitantes pueden llegar a una ciudad colonial encantadora, de calles angostas y empedradas, adornadas con la arquitectura colonial de los recintos religioso que encierran una inmensa riqueza cultural, lugar reconocido como Patrimonio de México y Pueblo Mágico del estado de Guerrero.
Una iluminación especial en templos, plazas, calles y callejones ofrece una espectacular vista que demuestra porque Taxco también es conocida como la ciudad luz, mientras que de día la impresión es similar al contemplar el Pueblo Mágico desde el teleférico o desde del mirador del Cristo Monumental.
Además de contar con una vasta gama de lugares con historias incontables y otras muy interesantes, recientemente Taxco sumó un atractivo más a su riqueza histórica y cultural, ya que además de contemplar el famoso mural de Juan O’Gorman en el Hotel Posada de la Misión, donde también se puede degustar de ricos platillos típicos de la región, los visitantes pueden recorrer la mina que recientemente se descubrió bajo los cimientos que sostienen el hotel.
De acuerdo a los especialistas, la mina que se abrió al público hace poco más de cuatro meses, alberga una riqueza mineral e histórica que puede ser apreciada por los turistas, ya que además de plata y otros minerales, se han hallado objetos antiguos utilizados como herramientas de los mineros que ingresaban al yacimiento.
El paseo se hace inolvidable al disfrutar de un recorrido de 800 metros en las góndolas del teleférico, que alcanza una altura hasta de 173 metros, hasta llegar a Monte Taxco, donde cualquier visitante puede consentirse con un relajante paseo a pie o a caballo, disfrutar del aire puro y la naturaleza, o bien, visitar el hotel Monte Taxco, que también ofrece una vista espectacular de la ciudad.
Un día no es suficiente para recorrer la Parroquia de Santa Prisca y San Sebastián, construida en 1758, con un estilo barroco churrigueresco, la Casa Borda, el Museo de Antropología Guillermo Spratling, el museo de arte virreinal, el santuario del señor de la santa Veracruz, el ex convento de san Bernardino de Siena, la parroquia de Chavarrieta, la de San Miguel Arcángel, la capilla de san Nicolás Tolentino, el templo expiatorio de la Santísima Trinidad, el museo Casa de las Lágrimas.
Mención aparte merece este último lugar, pues es una hermosa casa construida a mediados del siglo 18, propiedad del Conde de la Cadena y conocida como la casa de las lágrimas debido a la infinidad de cruentas y tortuosas historias de las que fue testigo a través del tiempo.
Durante la guerra de Independencia, el general Morelos la ocupó como su cuartel general, mientras que a finales del siglo 19, la casa infundía respeto y miedo por su aspecto tétrico, lúgubre y escalofriante, derivado de todas las tragedias acaecidas en el inmueble, donde se dice que se han visto fantasmas, escuchado gemidos de gente, alboroto de cadenas y llantos de mujeres y niños, así como algunos espectros que se aparecen en los distintos rincones de la casa.
Entre la riqueza natural de Taxco se pueden mencionar las grutas de Cacahuamilpa y la cascada de Cacalotenango.
Después de tanto admirar y caminar, los hoteles boutiques, reconocidos como Tesoros de México, garantizan una estancia en total tranquilidad, tal es el caso del Hotel Pueblo Lindo, que presumen una espléndida vista que destaca la belleza arquitectónica de los recintos religiosos del lugar, mientras que el Hotel de Cantera y Plata, satisface hasta el gusto más elegante y exigente, desde su recámara principal, construida en lo más alto de Monte Taxco.
No menos importante resulta mencionar que para deleitar la exquisita gastronomía de la región y un buen mezcal, el restaurante el Rincón del Toril y el Rosa Mexicano, conforman las principales opciones en Taxco de Alarcón, Guerrero.
Y antes de que decida concluir su paseo por la ciudad, no olvide pasar al mercado de los artesanos de plata, donde encontrará una infinidad de piezas con la garantía de originalidad y genuinidad en el trabajo realizado por las cientos de familias que han transmitido el oficio de generación en generación.
Es así como Guerrero también tiene qué presumir y no dejar pasar la oportunidad de apreciar las bellezas encerradas en su Triángulo del Sol.