Tras reforma hacendaria, crece 22.9 por ciento la recaudación fiscal

MÉXICO, DF. 2 de marzo de 2014 (Quadratín).- La reforma hacendaria que entró en vigor este año dejó buenos dividendos para el Gobierno Federal, pues la recaudación tributaria reportó un incremento anual de 22.9 por ciento en enero de 2014, informó la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP).

De acuerdo con el informe de finanzas públicas del primer mes del año, la captación tributaria ascendió a 209 mil 59 millones de pesos en el período en cuestión, monto que se compara superior a los 162 mil 809 millones que obtuvo en enero de 2013.

La mayoría de los impuestos generaron una recaudación positiva el gobierno federal en este primer mes de 2014. El impuesto sobre la renta (ISR) logró captar 116 mil 648 millones de pesos en el primer mes del año, lo que significó un aumento a tasa anual de 26.2 por ciento, respecto al mismo período de 2013.

Cabe recordar que la reforma hacendaria eliminó o acotó diversos beneficios que se otorgaban a través de ese gravamen, además de que se aprobaron nuevas tasas para quienes tienen mayores ingresos, así como algunos nuevos impuestos relacionados con la obtención de dividendos y utilidades.

Por su parte, el impuesto al valor agregado (IVA) permitió una recaudación de 69 mil 305 millones de pesos durante enero de 2014, lo cual fue 12.4 por  ciento superior a lo registrado un año antes. Desde este año se eliminó la tasa preferencial que había en la zona fronteriza, por lo que todo el territorio nacional paga el Impuesto al Valor Agregado a 16 por ciento%

También se incluyeron nuevos bienes y servicios a este gravamen como los alimentos a mascotas, chicle y transporte foráneo, entre otros. El impuesto especial sobre producción y servicios (IEPS) fue el que presentó la tasa de crecimiento más elevada en el sistema impositivo mexicano, ya que a través de este tributo se obtuvieron 13 mil 991 millones de pesos en el primer mes de este año, lo que representó un incremento de 79.5% más que lo captado en enero de 2013.

Favorecieron a las arcas hacendarias los nuevos gravámenes en materia de alimentos con contenido calórico y bebidas edulcoradas, concluye la dependencia.