Tras suspensión, comisionado Goodell escuchará la apelación de Brady

NUEVA YORK, NY, 15 de mayo del 2015.- Luego que este jueves el quarterback de los Patriots, Tom Brady decidiera apelar formalmente la sanción impuesta por la NFL, luego que una investigación comprobara su participación la trampa de desinflar balones ante de disputar el juego de campeonato de la Conferencia Americana ante los Colts, este viernes la liga informó que será el comisionado, Roger Goodell quien escuche al Jugador Más valioso del pasado Super Bowl.

Brady deberá perderse los primeros cuatro partidos de la temporada del 2015, además el equipo deberá pagar una multa histórica de 1 millón de dólares y no podrá tener selección colegial en las primera y cuarta rondas del draft del 2016. Por ello es que Goodell estará presente, indicó NFL Network.

La decisión de Goodell para escuchar la apelación de Brady obedece a una solicitud del Sindicato de Jugadores de la Liga (NFLPA) establecida en su contrato colectivo del 2011.

La suspensión del cuatro veces campeón de la NFL se basó en las conclusiones del Informe del abogado Ted Wells, que concluyó que “era más probable que no» que Brady estuviera enterado «al menos en general, de las actividades inapropiadas» del partido celebrado en el Gillette Stadium el 18 de enero pasado.

La NFLPA presionó públicamente a Goodell para nombrar un árbitro neutral para escuchar la apelación. «Dada la historia de la NFL de la inconsistencia y las decisiones arbitrarias en materia disciplinaria, es justo que un árbitro neutral escuchar este llamado», dijo la NFLPA en un comunicado.

El Informe Wells, publicado el 6 de mayo, también declaró que Brady no cooperó plenamente con la investigación de la liga, al negarse a entregar a «ninguna evidencia electrónica pertinente.»

La falta de cooperación, en parte, llevó a la suspensión de cuatro partidos dictada por la NFL.

Entre los que representan el quarterback patriotas será abogado laboralista Jeffrey Kessler, quien ha luchado con éxito la NFL en los casos anteriores, como el escándalo BountyGate donde se involucró a varios jugadores de los Saints de Nueva Orleans.

Por su parte el equipo todavía no ha anunciado si apelará la multa económica o la pérdida de sus selecciones colegiales. El dueño Robert Kraft, declaró después que se anunciara el castigo que la pena, «superó con creces cualquier expectativa razonable.»