A DOS PUNTAS: Migración: muy pronto para canta victoria

Si hace tan solo tres años alguien hubiera dicho que este momento era posible pocos le hubieran creído.

Pero a pesar de todos los pesares ahora hay versiones sobre posibles acuerdos entre demócratas y republicanos en torno a un proyecto de reforma migratoria en Estados Unidos.

En otras palabras, el sentido común habría hecho una irrupción brutal en la política de los Estados Unidos.

De acuerdo con el diario “Los Angeles Times”, es posible que una primera propuesta, producto del trabajo de un grupo de senadores de los dos partidos, sea presentada a principios de abril ante el Comité Judicial del Senado estadounidense.

Hay algunos elementos de inconformidad, al menos de acuerdo con los reportes en torno  la propuesta. “Es un poco perturbador que los senadores estén bien con tratar a los inmigrantes en un forma que nunca tratarían a sus votantes”, comentó por ejemplo la revista “The Atlantic”.

Pero el punto esencial es que existe la seria posibilidad de una propuesta cuyo contenido puede no ser perfecto pero puede ser enmendado y por lo pronto es mucho mejor que lo que se tiene, y además con reales perspectivas de ser aprobada.

La idea, en el peor de los casos, es que haya una ley que el mismo congreso pueda modificar. Después de todo, los inmigrantes y sus aliados tienen ya experiencia en esa actividad y cada vez mas, la conveniencia política de los partidos está mas acorde con su realidad.

Cierto. Es muy temprano para cantar victoria y el camino legislativo es tortuoso y largo, lleno de trampas. Este reportero recuerda como a fines de 1984 una propuesta de reforma migratoria que parecía un hecho, la Simpson-Mazzoli -por sus impulsores, el senador republicano Alan Simpson y el diputado demócrata Romano Mazzoli- fracasó en el último momento, cuando surgió un desacuerdo sobre los fondos para su instrumentación.

Pero también es cierto que esa legislación volvió al año siguiente y fue aprobada como ley Simpson-Rodino: otra vez el senador Simpson pero acompañado esa vez por el diputado demócrata y entonces presidente del Comité Judicial de la Cámara baja Peter Rodino.

Hace tres años parecía imposible. Hoy está en lo viable, pero los migrantes y sus aliados no deben descuidarse.

QMX/jcf