Con cédula digital avanza IMSS en la transformación de sus servicios
CIUDAD DE MÉXICO, 13 de abril de 2023.- De acuerdo a la Firma EPLOC (Estrategias Públicas Locales) la capacidad de mutación y adaptación del virus SARS-CoV-2 tiene preocupados a los científicos y autoridades de salud internacionales
Este 11 de marzo de 2023 se cumplieron tres años del inicio de la implementación de las políticas de emergencia para el combate del COVID-19 en México y, a pesar de haber transitado por seis olas, nuestro país no tiene claridad ni certeza de las secuelas sociales, económicas y de salud que la enfermedad dejó.
En el contexto global, aún con esquemas de vacunación completos y refuerzos aplicados, se tienen rebrotes breves y nuevas variantes en algunas partes de los continentes asiático y europeo, lo que ha provocado que no pueda declararse formalmente el fin de la emergencia sanitaria mundial.
Aunque pareciera que el aumento de casos confirmados no alcanza los grandes números de las primeras olas, es la capacidad de mutación y adaptación del virus lo que tiene preocupados a los científicos y autoridades de salud internacionales.
Hasta el 27 de marzo de 2023, la Secretaría de Salud reportaba 7,527,885 casos confirmados totales y 333,449 defunciones totales por COVID-19, además de una cobertura de vacunación del 84% en personas de todas las edades.
La tasa de incidencia de casos acumulados es de 5,736.4 por cada 100,000 habitantes, esto con respecto a las proyecciones de la población a mediados del 2023.
En la Conferencia Matutina “El Pulso de la Salud” del Gobierno de México, el 28 de marzo del 2023, se informó que el descenso de los casos positivos de COVID-19 en las últimas 7 semanas era más lento que en las primeras semanas del año.
Estos son algunos datos que forman parte del documento “COVID-19: secuelas de una pandemia”, un recuento de lo que nos ha dejado la emergencia sanitaria derivado del COVID-19, presentado por EPLOC, a tres años de haberse declarado como tal en nuestro país.
El reporte señala que, durante la pandemia, México ha tenido que hacer frente a la emergencia sanitaria con limitaciones en su capacidad de respuesta debido a barreras estructurales que han existido de manera crónica.
Dichas barreras se pueden clasificar en dos grandes grupos: por un lado, están las relacionadas con el sistema de salud y por el otro, las relacionadas con la capacidad de la población para implementar las medidas de prevención y atención.
La cobertura de los servicios de salud en México ha sido deficiente durante décadas. Según datos del CONEVAL, entre 2018 y 2020 se incrementó en 12% la carencia de acceso a servicios de salud, pasando de 16.2% a 28.2%, equivalente a 15.6 millones de personas.
Si bien, de acuerdo con la OMS y el Banco Mundial, México alcanzó en 2017 el 76% de cobertura universal de salud, ésta no es pareja para todos.
Adicionalmente, el sistema nacional de salud se encontraba en un proceso de transición del Sistema de Protección Social en Salud (Seguro Popular) al nuevo modelo abanderado por el Instituto Nacional de Salud para el Bienestar (INSABI) y existía confusión en la forma de operar.
Pero ¿hacia dónde va la pandemia en México, y por qué no se ha declarado un término de la emergencia sanitaria nacional si la mayoría de la población ha regresado a la normalidad?, -cuestiona la firma-.
Conforme avanzan las mutaciones y se realizan nuevas investigaciones en el mundo, cada vez es más claro que la COVID-19 es una enfermedad que se quedará durante mucho tiempo antes de poder erradicarla, y aunque hoy se apuesta por su rebrote estacional, las secuelas que deja son mayores a los días que dura en nuestro sistema
La firma concluye que en México, los verdaderos problemas a resolver son la estructuración del sistema de salud, la definición de las facultades de las instituciones nacionales, y, sobre todo, la atención primaria de los pacientes que han padecido COVID-19, y que tienen síntomas aún después de padecida la enfermedad.
“Debemos estar preparados para nuevas emergencias, y contar con planes de acción que permitan la óptima atención del paciente. Ante nuevas variantes, México tiene nuevos retos”.