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SAN LUIS POTOSÍ, SLP., 19 de agosto de 2018.-Cualquier afán por silenciar a la prensa no perdura, tampoco se puede silenciar todo, la prensa y el poder político están destinados a convivir, y aunque su relación sea cambiante, son un factor de equilibrio democrático, aseveró el periodista y columnista, Rafael Cardona.
Ante la renovación del Ejecutivo federal, el autor de la columna El Cristalazo, trasmitida por Grupo Fórmula, advierte: al poder político solo lo pueden equilibrar el Congreso, la academia y la opinión pública.
“No va desaparecer el poder político y tampoco desaparecerá el ejercicio del periodismo. ¿En qué condiciones se realizará? Pues en las que se pueda”, sostiene en entrevista el también autor del Espejo de los Días, quien fue invitado de honor en la ceremonia de inauguración de la Agencia Quadratín en San Luis Potosí.
Rafael Cardona enfatiza que la realidad siempre necesita ser divulgada, lo cual garantiza que el quehacer de los periodistas deberá estar presente.
“No sé si seguirá imperando en el criterio del Gobierno la existencia de un periodismo que es propiciado por el mismo Gobierno en contraparte de una prensa crítica, desconozco si prevalecerá la idea de la prensa fifí, socia de la mafia del poder, pero lo que sí sé es que todos los modos de Gobierno van a cambiar”, afirma quien ha ejercido el periodismo por más de cinco décadas desde distintas trincheras.
A partir del próximo primero de diciembre también se percibirá cuál es el compromiso del ahora Presidente electo y su gabinete con los Derechos Humanos y la libertad de expresión -refiere Cardona- cuando se han registrado en el país decenas de muertes violentas generadas por una guerra contra el narcotráfico iniciada en 2006.
Aunque considera que también debería ser un compromiso del nuevo gobierno investigar las muertes y condiciones que rodearon los homicidios de 118 periodistas ocurridos en los últimos 18 años en México, el columnista puntualiza que también deben de ser investigados los asesinatos de las víctimas de la guerra del narco.
“Me preocupa mucho más que haya 200 mil mexicanos muertos en una guerra que no se termina, niños, mujeres, comerciantes y desempleados quienes también han sufrido la secuencia de la violencia, no creo que los periodistas merezcan investigaciones especiales, ni protecciones especiales, creo que los mexicanos no deberían de morir en una guerra interminable”, recala el periodista al argumentar que todas las vidas ante la ley deben de tener el mismo valor.