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MONTERREY, 11 de junio (Quadratín México).- Al ser cuestionado el gobernador de Nuevo León, Rodrigo Medina, sobre los alcaldes que entregaron las llaves municipales a Jesucristo, agregó que al final del día los gobernantes son personas y “al César lo que es del César y a Dios lo que es de Dios”.
El funcionario estatal aseguró que debido a que él fue electo por el pueblo para gobernar le toca esa responsabilidad.
“Yo soy gobernador constitucional del estado de Nuevo León y mi responsabilidad es precisamente gobernar el estado; los dichos son muy sabios y hasta ahí lo voy a dejar: Al César lo que es del César y a Dios lo que es de Dios”, señaló.
También se le preguntó que si estaba de acuerdo con que los mandatarios por un momento pueden dejar su investidura y hablar a título personal. “Uno es gobernador o alcalde o la posición legal que ostenta en ese momento, todo el tiempo, y dura y tiene un término constitucional en este caso, lo que es por parte del gobierno del estado o de las presidencias municipales por lo que dura el mandato”.
Dijo que al final del día los gobernantes son personas, pero todo el tiempo conservan la investidura.
“No es como que dejes de ser gobernador un momento, no es algo que se quita o se pone”, sostuvo.
Se negó a entrar en especulaciones sobre el tema en donde Margarita Arellanes, la alcaldesa regia, “entregó” la ciudad de Monterrey a Jesús, durante un evento de corte religioso, celebrado en la Plaza Zaragoza, el pasado sábado.
“Yo no voy a hablar más de este temas, son temas personales, son de convicción religiosa, desconozco si haya motivos de carácter político involucrado”, manifestó.
Añadió que a los gobernantes les toca gobernar, hacer que se cumpla la ley y llevar a cabo las actividades conforme al mandato del pueblo. “Por eso digo que a Dios lo que es de Dios y a César lo que es del César”, puntualizó.
QMX/fm