Denuncia oposición que Morena legisla por medio de fe de erratas
CIUDAD DE MÉXICO, 20 de abril de 2020.- Si en verdad se quiere despresurizar al Sistema Penitenciario, el presidente de México Andrés Manuel López Obrador, tiene dos herramientas que ya podría haber utilizado: el indulto o el programa de libertad anticipada, aseveró el senador sin partido, Emilio Álvarez Icaza Longoria, durante la discusión de la Ley de Amnistía, la cual calificó como un “capricho presidencial”.
Durante la discusión de la Ley de Amnistía en el Salón de Plenos del Senado de la República, el legislador sin partido señaló que esos beneficios ya los podría haber utilizado el Primer Mandatario, de hecho, podría utilizar su capital democrático, “ese que tanto le gusta presumir”.
“Para hablar con las gobernadoras y los gobernadores, la Jefa de Gobierno para hacer un programa nacional, porque este programa, esta iniciativa es solo de alcance federal y no se hace cargo del alcance local”, agregó.
Sin embargo, la sesión ordinaria que se realizó este lunes 20 para concluir el proceso de dicha Ley la consideró “un capricho presidencial” que la mayoría legislativa consecuente exhibió al Senado de la República como una ventanilla de trámite.
Álvarez Icaza dijo que la sesión se convocó para atender o pretender atender una estrategia de control de daños del deterioro que ha tenido la imagen presidencial.
De la llamada Ley de Amnistía, señaló que no cumple con los fines que dice buscar, pues no es ni una amnistía en los términos que se entiende como tal ni va a ayudar a despresurizar humanamente el sistema de reclusorios federal y al país.
Si lo que se quería es descongestionar es el Sistema Penitenciario Federal, que lo cual respaldó porque es un sistema corrupto y sobrepoblado, dijo que lo primero que tenía que hacerse es echar atrás la reforma al 19 constitucional que habla de la prisión preventiva oficiosa.
En algunas entidades como en la Ciudad de México o el Estado de México se han preliberado a más de tres mil persona. El senador sin partido criticó que incluso quien piense que esta iniciativa servirá para la pandemia, “se equivoca o miente”, pues el proyecto de decreto establece la creación de una comisión en 60 días, luego revisará caso por caso y pueden pasar tres o cuatro meses.
“Cuando acabe la cuarentena todavía no va a estar funcionando esta ley, no sirve para ese fin, en realidad, déjenme decirlo con mucha claridad, hay una enorme hipocresía en todo esto”, criticó.
“Yo le digo al Presidente Andrés Manuel López Obrador: hace mal en preocuparse por el desgaste de su imagen, cuando hay una crisis que requiere toda su atención, pero me queda claro que no hay disposición para rectificar”, conminó el legislador.
Por su parte, la senadora del PAN, Indira de Jesús Rosales San Román, consideró “verdaderamente absurdo, lamentable, ridículo, decepcionante y frustrante” legislar única y exclusivamente para cumplir los caprichos del Presidente, cuando deberíamos de ser en favor de las familias mexicanas y del sistema de salud que tanto necesita en este momento el Senado de la República.
Si era tanta la necesidad por sesionar por hacerle justicia a los mexicanos, señaló que entonces se debió de aprobar el ingreso básico universal propuesto por o la Ley de Emergencia y Recuperación Económica.
También las propuestas para proteger al personal médico que sale día a día para trabajar por el país y que ha sufrido graves atentados contra su integridad personal sin que las autoridades hagan absolutamente nada al respecto.
Por un plan de reactivación económica que ayude a las micros y pequeñas empresas, que día a día están asumiendo en una crisis económica y de incertidumbre a las familias mexicanas.
La panista coincidió con el senador sin partido sobre que la Ley de Amnistía tan sólo tomará 60 días, después de su aprobación, la creación de una comisión que revise cada caso. “De aquí a dos meses, más el tiempo que tome la revisión de cada caso, pues muy probablemente ya será obsoleta esta situación”, reiteró.