Ante riesgo de expansión de conflicto magisterial, GPPRD pide diálogo

CIUDAD DE MÉXICO, 22 de junio de 2016.- “Ante el riesgo de la expansión del conflicto magisterial a otras zonas del país por la renuencia del Gobierno federal a establecer un diálogo sobre la reforma educativa”, el diputado del PRD Omar Ortega Álvarez exhortó al Congreso de la Unión a intervenir para detener la escalada de violencia.

Añadió en un comunicado que pidió al Congreso exhortar al Ejecutivo federal a reconsiderar su actitud y convocar al diálogo con quienes se oponen a la aplicación de algunos artículos de la Ley General del Servicio Profesional Docente.

Argumentó que la estrategia de indiferencia y arrogancia del Gobierno federal –a través del secretario de Educación, Aurelio Nuño Mayer– hacia los inconformes ha sido contraproducente, ya que generó encono, confrontación y la pérdida de vidas humanas.

“Nadie quiere afrontar un escenario de encono y enfrentamientos mayores” y “nadie desea pagar el precio de esa confrontación”, dijo en una propuesta de punto de acuerdo que puso a consideración de la Comisión Permanente del Congreso de la Unión.

Tras condenar la violencia y los asesinatos ocurridos en Oaxaca dijo que, desde luego, la ley debe respetarse y cumplirse, particularmente en materia de Derechos Humanos, lo que implica ánimo de apertura y conciliación a través de los cauces institucionales en lugar de cerrazón y endurecimiento.

Expresó, con sus correligionarios del GPPRD, sus condolencias a los familiares de las víctimas y deploraron el uso de armas de fuego como respuesta de la autoridad a las movilizaciones sociales.

Aclaró que está fuera de toda discusión la necesidad de mejorar la calidad de la educación pública, de contar con un sistema de evaluación integral del sistema educativo y de regular al sistema profesional docente basado en el mérito, pero subrayó que nada de eso se logrará sin la participación y colaboración de maestros y, menos aún si se les despide, descuenta el salario y reprime cuando protestan.

Nada de lo ocurrido –puntualizó– mejora las escuelas deterioradas o inexistentes, la enseñanza abandonada por tantas décadas o la calidad del sistema educativo en su conjunto, pero sí expande el encono hacia otros sectores.

“Exhortamos de manera respetuosa a los gobiernos federal y estatal a impulsar el diálogo y a apartarse de las vías autoritarias para resolver el actual conflicto. No podemos renunciar a esta opción. El costo de seguir buscando enfrentamientos sería muy alto”, reiteró.

Y propuso al Congreso que pida a la Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH) su coadyuvancia en las investigaciones y que determine si en los hechos de Oaxaca las autoridades se apegaron a los protocolos de Derechos Humanos para el control de manifestaciones.