Aspira Beatriz Paredes a educación que equilibre desigualdades

CIUDAD DE MÉXICO, 30 de abril de 2019.- Sólo cuando se le pregunte a los niños si nos puede leer un libro, a los jóvenes hacer una operación matemática, cuando saludemos a un egresado de una universidad pública con la confianza de que encontrará empleo, entonces nos podremos dar por satisfechos, aseguró la senadora del PRI, Beatriz Paredes Rangel.

En su experiencia de haber participado en siete legislaturas, destacó que ha incidido como miembro de la mayoría o de la oposición en decenas de leyes, y en esta ocasión no es la excepción en la nueva Reforma Educativa que sustituye a la de 2013, impulsada por el ex presidente Enrique Peña Nieto.

En su intervención para referirse proyecto de decreto por el que se reforman, adicionan y derogan diversas disposiciones de la Constitución Política, la priista aseguró que su convicción es que no hay nada más trascendental que la educación.

En su responsabilidad como senadora, subrayó que aspira a una educación que permita a las niñas y a los niños mexicanos la maravilla de la lectura y la posibilidad de escribir claramente y comunicarse más allá de sí mismos y de su entorno inmediato.

«Que inculque la comprensión de las matemáticas para que accedan al universo de los números y con ello, al pensamiento abstracto y complejo. Que despierte su vocación por la ciencia y el arte»

«Que enriquezca su capacidad de convivencia en la pluralidad y en su respeto a los demás. Que forme sus aptitudes y habilidades para que se convierta en un ser productivo e independiente. Que conozca de historia y civismo para que recree en su identidad y pertenencia», continuó.

Y agregó: «que desarrolle sus capacidades motrices y le enseñe a cuidar de su cuerpo y el de los demás. Que nutra de los valores esenciales de la solidaridad, la cooperación y la aspiración a la igualdad en la diversidad. Aspiro a una educación que equilibre las desigualdades, que sea un instrumento de equidad y movilidad social».

La senadora del PRI señaló que el Estado mexicano está en su obligación al defender la prioridad del proceso de aprendizaje de los educandos y por ello es indispensable que provea del presupuesto que haga sustentable la reforma y las conquistas de obligatoriedad que se han consagrado en el dictamen aprobado.

En conferencia de prensa posterior, la dirigente nacional del PRI y también senadora, Claudia Ruiz Massieu, aseguró que su partido no cree que ninguna política pública sea inamovible o esté escrita en piedra, por lo que pueden ser perfectibles.

«La propia Reforma Educativa de 2013 permitió áreas de oportunidad y esta nueva reforma no es del Presidente y su partido, sino la que el país necesitaba», señaló acompañada de los demás senadores de la bancada tricolor.