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MADRID, 19 de junio (Quadratín México).- Al menos 15 personas murieron y otras 18 resultaron heridas tras el ataque de la milicia integrista islámica somalí Al Shabab al recinto de las Naciones Unidas en Mogadiscio, informó el Gobierno de Somalia.
Este miércoles, un atacante suicida y varios hombres armados arremetieron contra la sede de Naciones Unidas en la capital de Somalia.
Un camarógrafo que se encontraba afuera de la oficina del Programa de Desarrollo de la ONU vio cuando cuatro hombres entraron a la sede, mientras el ataque era repelido por soldados de la Unión Africana y de la fuerza del ejército somalí.
Las oficinas del Programa de Desarrollo de las Naciones Unidas (PNUD), ubicadas al lado del aeropuerto internacional de Mogadiscio, fueron el blanco del ataque extermista.
En rueda de prensa, el ministro somalí del Interior, Abdikarim Guled, precisó que de los 15 fallecidos, cuatro eran trabajadores extranjeros, cuatro guardias de seguridad y siete eran asaltantes de Al Shabab.
Los heridos son civiles que pasaban junto al recinto y guardias de seguridad de los edificios, quienes han sido trasladados a hospitales cercanos para recibir tratamiento.
Poco después, las tropas de la Misión de la Unión Africana en Somalia (AMISOM) aseguraron haber recuperado el control del recinto de la ONU, atacado primero por un coche bomba alrededor del mediodía local (09:00 hora GMT), al que siguió el asalto de un número indeterminado de milicianos.
A través de su cuenta en Twitter, AMISOM afirmó que sus soldados estaban desplegados en el recinto “a los pocos minutos” de comenzar el ataque, y que “actualmente, han asegurado” el complejo.
El primer ministro somalí, Abdi Farah Shirdon, confirmó, a través de un comunicado de prensa, que “las fuerzas de seguridad de Somalia y de AMISOM respondieron inmediatamente tras las explosión inicial y lograron controlar la situación” .
Asimismo, Shirdon condenó el suceso y señaló que “los somalíes rechazan a Al Shabab” .
“Mientras UNSOM (la delegación de la ONU en el país del Cuerno de África) y nosotros reconstruimos Somalia, ellos no ofrecen sino sufrimiento y destrucción. Alá los condenará” , sentenció el premier.
Por su parte, el representante especial de la Unión Africana (UA) en Somalia, Mahamat Saleh Annadif, lamentó y rechazó el “cobarde ataque llevado a cabo por los terroristas de Al Shabab” .
“Estos ataques futiles de Al Shabah sólo van dirigidos a interrumpir la voluntad del pueblo somalí para recuperarse de años de violencia en Somalia, y no impedirán nuestros esfuerzos colectivos para seguir apoyando a los somalíes en la reconstrucción de su país” , señaló Annadif en un comunicado.
En un mensaje difundido en su cuenta de Twitter, Al Shabab justificó el ataque y dijo que las Naciones Unidas son “un mercader de muerte y una fuerza satánica del mal” con “un largo y vergonzoso historial de difusión de pobreza, dependencia y descrédito”.
A pesar de los avances logrados el pasado año en el terreno político, Somalia se encuentra todavía inmersa en un prolongado y complejo conflicto armado.
Las tropas de AMISOM, el Ejército somalí, las Fuerzas Armadas etíopes y varias milicias progubernamentales combaten a Al Shabab, la milicia fundamentalista islámica dominante desde 2006.
Al Shabab, que anunció en febrero de 2012 su unión formal a la red terrorista Al Qaeda, lucha supuestamente para instaurar un estado islámico de corte wahabí en Somalia.
Aunque las tropas aliadas arrebataron a finales del pasado septiembre a Al Shabab su mayor bastión, la ciudad costera sureña de Kismayo, los radicales todavía controlan buena parte del centro y el sur de Somalia, donde el frágil gobierno del país aún no puede imponer su autoridad.
Somalia vive en un estado de guerra y caos desde 1991, cuando fue derrocado el dictador Mohamed Siad Barré, lo que dejó al país sin un gobierno medianamente efectivo y en manos de milicias radicales islámicas, señores de la guerra que responden a los intereses de un clan determinado y bandas de delincuentes armados.
QMX/bhr