Cambio en fecha para elegir PJ, solo con reforma constitucional: Monreal
CIUDAD DE MÉXICO, 18 de julio de 2024.- La expresidenta del Partido Revolucionario Institucional (PRI), Dulce María Sauri, confía en las autoridades electorales para resolver las impugnaciones en contra de la asamblea y los cambios, que considera arbitrarios, a los estatutos del partido.
Esto, luego de que el magistrado del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF), Reyes Rodríguez, quien en su proyecto de resolución consideró que las acusaciones deben de ser dirimidas y resueltas en primera instancia por el órgano interno de justicia del PRI.
Sauri Riancho consideró que Rodríguez Mondragón da por hecho que el tricolor tiene un instrumento propio para resolver este tipo de impugnaciones, sin embargo, lo más relevante es que al proyecto se le da un plazo apremiante para solucionar las objeciones a más tardar el 22 de julio.
“Esto favorece que la instancia de Justicia Partidaria del PRI se hiciera guaje, es decir que no resuelva el asunto, que trate de patear la pelota y dejarlo volando hasta que adquiera el carácter de ser una cosa juzgada”, advierte la priista.
Sauri sostiene que “por más que se le queman las habas a Alejandro Moreno para lograr su reelección” hay situaciones que están reguladas por la ley y se deben de respetar, no se pueden modificar al deseo de una persona los reglas al interior de PRI.
Las impugnaciones que se han presentado, tienen un recurso considerando madre contra la asamblea realizada el pasado 7 de julio, por lo que si prospera, automáticamente anularía esa convención con todo y la reforma a los estatutos.
La otra objeción presentada es contra la convocatoria para la renovación de la dirigencia nacional, siendo esta la que busca resolver el magistrado Reyes Rodríguez Mondragón.
Dulce María Sauri recalca que toda su vida ha defendido al Revolucionario Institucional, por eso está luchado ante todas las instancias por la sobrevivencia del organismo político, lo cual no es placentero, pero si necesario, algo que, dice, se tuvo que hacer hace tiempo.