Envía Sheinbaum mensaje a Trump: nunca nos subordinamos
CIUDAD DE MÉXICO, 10 de diciembre de 2024.- Bajo la premisa que “Lo que no se nombra, no existe’’, el Pleno del Senado de la República aprobó, con el voto en contra de Lilly Téllez, reformas a 31 artículos de la Constitución para incluir expresiones de género Presidenta, Gobernadora, Jefa o Presidenta Municipal.
La propuesta de la morenista Olga Patricia Sosa Ruiz reforma a diversas disposiciones de la Carta Magna para emplear expresiones inclusivas de género y visibilizar la representación de las mujeres en cargos públicos, estructurada en tres vertientes: el lenguaje como herramienta de igualdad, compromisos internacionales de México, y necesidad de una reforma a nivel constitucional.
El Pleno del Senado de la República aprobó con 113 votos a favor y uno en contra la reforma que parte del principio de que “el lenguaje no sólo refleja, sino también transmite y refuerza estereotipos de género que perpetúan desigualdades”.
Al presentar el dictamen por la Comisión de Estudios Legislativo, el morenista Enrique Inzunza Cazarez destacó que el país se encuentra en un momento histórico que refleja los avances de la lucha por la igualdad de género, es por ello que se han logrado avances constitucionales en materia de igualdad sustantiva que han tenido desde años atrás reformas pero se han quedado aún en una carga histórica del lenguaje tanto verbal como escrito con tonos de discriminación.
Por la Comisión de Puntos Constitucionales, el morenista Óscar Cantón Zetina puntualizó que esta reforma número 15 de la 65 Legislatura cumple con diversos compromisos, entre los que se destaca la importancia de la visibilización de la mujer y su contribución incasablemente al desarrollo y consolidación de la nación.
Por mayoría, en lo particular, la asamblea aceptó una reserva de las senadoras Sasil de León Villard y Edith López Hernández que considera la inclusividad se debe establecer a efecto de transformar el lenguaje jurídico del texto constitucional. Por ello, es actualizar el lenguaje para no sólo señalar los cargos públicos sino establecer la cultura de la igualdad y la no discriminación por razón de género.