Voy a sacar al narco de la CDMX cueste lo que cueste: Barrales

CIUDAD DE MÉXICO, 24 de junio de 2018.- Ante alrededor de 150 mil personas de acuerdo a cifras de los organizadores, la candidata a la Jefatura de Gobierno, Alejandra Barrales, afirmó que la batalla electoral del primero de julio la ganará, pues así está acostumbrada en su historia de vida.

Basada en encuestas académicas de universidades, dijo que los tres candidatos con posibilidad de llegar a la Jefatura de Gobierno, son las de ella las mejores propuestas.

Por ello, trabajará para volver hacer de la Ciudad de México la más segura del país, pues a diferencia de los proyectos de gobiernos de sus contendientes, cuando ven la crisis y el problema no proponen el perdón.

“No vamos a perdonar a los secuestradores, a los violadores, a los narcotraficantes, a los que le quitan la quincena a los camiones”, dijo en compromiso de sacar al narco de la ciudad le cueste lo que le cueste.

En su mensaje de cierre de campaña, agradeció a las jefas de familia refiriéndose a las madres de la sociedad civil simpatizantes y militantes del Frente.

En una autocrítica, aceptó la poca responsabilidad que han tenido los gobiernos perredistas durante los últimos 20 años en la capital, sin embargo, aseguró que ella es gente responsable.

“Cuando nos proponemos algo aún lo podemos lograr o alguien tiene duda quién va a ser la próxima Jefa de Gobierno de esta ciudad”, expresó en su confianza.

De manera especial, Alejandra Barrales agradeció el apoyo del candidato del Frente, Ricardo Anaya, a quien aseguró será el próximo Presidente de la República.

Destacó su orgullo al reconocer de venir de “rifársela desde abajo” y lograr sus sueños de ser abogada y maestra en Administración Pública.

“Yo soñé con ser sobrecargo, con ser diputada, con dar noticias en la tele y cuando comentaba mis sueños lo hacía en la colonia popular Tránsito, donde nací, y la gente me decía: eso no es para ti”, recalcó.

Una vez más, aseguró que no se creyó esta historia era para ella porque no sólo se convirtió en sobrecargo, también en dirigente nacional y tres veces diputada, una vez senadora.

Admitió que en la Ciudad de México ya pegó la inseguridad y la gente está enojada por la desigualdad, con justa razón porque todos los gobiernos, de todos los colores le han fallado a la ciudadanía.