
Rechazan gobernadores de México impuesto a remesas de EU
CIUDAD DE MÉXICO, 21 de abril de 2025.- Cuando existe un camino de privilegios o beneficio de unos pocos en detrimento del bien de todos, tarde o temprano la vida en sociedad se vuelve fértil para la corrupción, el narcotráfico y la violencia, fue el mensaje que el Papa Francisco dejó a los mexicanos en su visita en febrero de 2016.
Desde el patio Central de Palacio Nacional, después de su encuentro con el presidente de la República, Enrique Peña Nieto, el fallecido Sumo Pontífice dejó este pensamiento ante la jerarquía católica, el gabinete legal y ampliado, los gobernadores del país, el cuerpo diplomático e invitados especiales.
En su mensaje de aquel 13 de febrero de 2016, el Papa Francisco aseguró llamó a las autoridades a garantizar vivienda adecuada, trabajo digno, alimento, justicia, seguridad y paz, ya que “no es un asunto de leyes”, sino de una urgente formación de responsabilidad que involucra a todo el pueblo mexicano en las distintas instancias públicas y privadas.
“A los dirigentes de la vida social, cultural y política les corresponde de modo especial trabajar para ofrecer a todos los ciudadanos la oportunidad de ser dignos actores de su propio destino, ayudándoles a un acceso efectivo de los bienes materiales y espirituales indispensables”, subrayó.
El Santo Padre reflexionó sobre el potencial de la juventud mexicana y la necesidad de legar un mejor país a las generaciones venideras un mejor México, pues señaló, que la principal riqueza del país hoy tiene un rostro joven.
“Un pueblo con juventud es un pueblo capaz de renovarse, transformarse; es una invitación a alzar con ilusión la mirada hacia el futuro y a su vez nos desafía positivamente en el presente y nos lleva inevitablemente a reflexionar sobre sobre la responsabilidad de construir el México que queremos, el que queremos para dejarle a las generaciones venideras», acentúo el representante católico.