Claudia Espino, la propuesta de Taddei a la Secretaría Ejecutiva del INE
@guerrerochipres
Desde la calle dos figuras del obradorismo construirán la nueva etapa de lo popular en su diálogo con las clases medias y con los valores de participación política consistentes con el liderazgo de la CDMX donde la igualdad sin corrupción y la presencia del Estado sin anulación del citadino exigente adquieren sentido en el arranque real de la elección 2024.
La negativa de las y los legisladores de oposición a ratificar a la Fiscal General de Justicia detonó la irrupción de Ernestina Godoy como candidata al Senado de la República y su integración a un equipo electoral con alta competitividad para la interlocución ciudadana.
Involuntariamente, la oposición colocó en el mismo camino a Godoy y Clara Brugada, la precandidata más aventajada en la Ciudad de México, quienes son referencia del movimiento social y político encarnado por Morena. Ambas impulsoras de la agenda relacionada con la igualdad social y el combate a la corrupción de aquellos a quienes, desde hace algunos años, incluso antes de Godoy, la prensa llamó “cártel inmobiliario”.
En su informe de cuatro años de labores, la ahora exfiscal adelantó que saldrá a las calles “para luchar contra el grupo político que ha operado la corrupción inmobiliaria (…) y a los que explotaban sexualmente a las mujeres».
La referencia es hacia los exfuncionarios panistas de la alcaldía Benito Juárez y al exdirigente priista Cuauhtémoc Gutiérrez de la Torre, procesado por operar, presuntamente, una red de Trata de Personas.
Si la oposición consideraba una victoria haber frenado la continuidad de Godoy, tuvo un pésimo cálculo político. De manera indirecta fortaleció la campaña de Brugada pese a la celebratoria reacción inicial por haberse “frenado” a la fiscal Godoy.
Críticas y perseguidoras de las expresiones de corrupción ligadas a las extorsiones inmobiliarias en la alcaldía Benito Juárez, Brugada y Godoy se reúnen en la historia de la Ciudad. Entre 2009 y 2012, Godoy fue directora general de Desarrollo Delegacional mientras Brugada era entonces delegada en Iztapalapa.
En los últimos cuatro años, en conjunto, desplegaron desde la alcaldía más poblada de la CDMX estrategias encaminadas a reducir la violencia contra las mujeres y los delitos de alto impacto.
Programas como Senderos Seguros o Siempre Vivas fueron reforzados con un trabajo de la FGJ que permitió disminuir los feminicidios en la capital nacional hasta en un 30 por ciento entre 2018 y 2023 y duplicar la vinculación a proceso de agresores de mujeres.
Dos de las mejores representantes de la transformación desde la CDMX —encabezada por Claudia Sheinbaum, quien con mucha probabilidad será la próxima y primera mujer Presidenta del país— juntas otra vez.
En noviembre, en su primer acto en la capital nacional como parte de su precampaña, Sheinbaum mencionó del acompañamiento con Brugada: “Juntas somos dinamita». Ahora se integra Godoy. ¿Tres son nitroglicerina?
Salvador Guerrero Chiprés es presidente del Consejo Ciudadano para la Seguridad y la Justicia de la Ciudad de México