The New York Times defiende reportaje sobre fentanilo
CHICAGO, 27 de enero (Quadratín México).- El director de Gun Owners of America (Propietarios de Armas de Estados Unidos, Larry Pratt, calificó hoy la propuesta de revisar los antecedentes criminales de los compradores de armas como una medida inútil para reducir la tasa de criminalidad en Estados Unidos, tanto porque la mayoría de los responsables de matanzas no tienen historial delictivo como porque los que si lo tienen pueden adquirir pistolas o rifles en el mercado negro.
Pratt dijo que ese tipo de requisitos, que integran el plan del presidente estadounidense Barack Obama para el control de armas, no sirven para bajar el número de crímenes en el país.
“Puede prevenir que una persona no compre un arma en una tienda determinada, pero esa misma persona en cualquier otro lugar la consigue”, expresó el defensor de las armas y quien dijo tener muchas de ellas en una caja fuerte.
Criticó también la propuesta de eliminar la venta de armas potentes, “las que propone no son las que se usan en las guerras, esas son ametralladoras, a las que solo hay que oprimir el gatillo y salen muchas balas. El caso de las semiautomáticas hay que jalar una vez para que salga una bala”.
Pratt insistió en que las armas se utilizan en la defensa personal y la Segunda Enmienda constitucional garantiza el derecho de portarlas. Rechazó que pueda ser cambiada la Constiución estadounidense para prohibirlo, como lo sugirió la ministra Sonia Sotomayor.
“Ella está equivocada y el resto de la Suprema Corte no está de acuerdo con lo que dice. Los fundadores de este país fueron muy claros de que la gente debe tener armas para evitar una tiranía en Estados Unidos y por eso tenemos armas”.
Aprobó el incremento de armas en posesión de los residentes de Newtown, Connecticut, lugar de la masacre en una escuela primaria el 14 de diciembre pasado.
“No quieren ver morir a sus propios hijos, y saben que el gobierno no es siempre capaz de dar protección y la policía no puede estar siempre presente”, señaló Pratt.
En ese sentido, dijo que se requiere cambiar la ley federal que prohibe las armas en las escuelas, a fin de que en lugar de emplear guardias, cuyo costo es elevado, se permita a los profesores y administradores de los planteles tener un arma escondida.
“Las masacres de los últimos 20 años han sucedido en zona libre de armas, especialmente en las escuelas. Todo el que trabaja en una escuela debe tener ese derecho”, precisó.
Agregó que después de los trágicos hechos en Connecticut, se están armando cientos de maestros en Utah, donde está permitido hacerlo.
En la escuela de Newtown, agregó, “tuvieron que esperar 20 minutos para que llegara la policía. Si hubieran estado armados no hubiera pasado la masacre”.
Ramos, el entrevistador, recordó que una reciente encuesta realizada por el Pew Research Center mostró que el 51 por ciento de los estadunidenses considera más importante controlar la posesión de armas de fuego para proteger los derechos de los estadounidenses.
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