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Promete Sheinbaum rescatar la petroquímica en México
CIUDAD DE MÉXICO, 27 de junio de 2024.- En el marco de los Diálogos Nacionales para la Reforma Constitucional del Poder Judicial con el tema ¿Qué Poder Judicial tenemos? ¿Qué Poder Judicial queremos?, el magistrado presidente del Poder Judicial de la Ciudad de México (PJCDMX), Rafael Guerra Álvarez, resaltó que la reforma propuesta respeta los derechos de magistrados y jueces que actualmente han adquirido por su carrera judicial, sabiduría, responsabilidad, compromiso, autonomía y amor al Pueblo, lo que se traduce en estabilidad judicial y la permanencia en el cargo.
En relación con las designaciones por voto popular, tratándose de jueces y magistrados, consideró, es necesario que este cambio se haga de manera gradual, es decir, se aplique a las personas juzgadoras de nuevo ingreso, para garantizar una transición basada en la carrera judicial y una justicia de calidad.
Reiteró que la justicia pronta y expedita ha sido históricamente un principio y preocupación de la Nación. Sin embargo, no se ha podido consolidar. “Colocar a las personas juzgadoras como responsables de la rapidez en los juicios y en caso contrario, la obligación del propio juzgador de fundar y motivar la tardanza, contribuye a materializar la aspiración de una justicia pronta y expedita, identificando las responsabilidades en las demoras”.
Además, refrendó su apoyo a la modificación del Consejo de la Judicatura, la garantía de una justicia rápida y eficiente, los ajustes en las remuneraciones y pensiones por retiro y la disminución del número de Ministras y Ministros en la Suprema Corte de Justicia de la Nación y la duración de su mandato.
También apoyó la sustitución del Consejo de la Judicatura, como órgano encargado de la administración, vigilancia, evaluación, disciplina y servicio de carrera, por dos órganos técnicos especializados, nombrados en el proyecto como Órgano de Administración Judicial y Tribunal de Disciplina Judicial, garantizarán la autonomía, independencia e imparcialidad de su labor y mejorarán el ejercicio de las facultades disciplinarias y administrativas de cada Poder Judicial.
Y resaltó que la voz del Pueblo es la que está dictando los mismos cambios y que se tiene que aceptar la revolución y transformación que ellos mismos han elegido.