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CIUDAD DE MÉXICO, 22 de marzo de 2017.- El lunes 13 de marzo, vecinos de la colonia General Anaya bloquearon el cruce de Eje 8 y la avenida Cuauhtémoc, en la delegación Benito Juárez.
El motivo era protestar contra la construcción de edificios de departamentos que afectan el abasto de agua a vecinos de la zona.
Cada vez más áreas de clase media en la Ciudad de México se ven afectadas por el abasto de agua, algo que antes sólo afectaba a las zonas más pobres, pues la distribución de agua en la capital se hace con criterios clasistas, dijo a Quadratín el experto Iván Azuara.
«Ya no tiene viabilidad la ciudad ósea no hay agua, no hay forma de que se sostenga esta ciudad con un crecimiento, ni aun con el reciclamiento de predios. El debate es si es una ciudad compacta o extensa, pero el problema es que ya rebasamos los límites del crecimiento desde hace mucho y ya empieza a haber escasez en zonas de clase media», afirmó el también integrante de la Red de Estudios de los Movimientos Sociales.
«Antes afectaba a ciertos sectores poblacionales porque no va a faltar el agua en las Lomas, pero sí puede faltar en Iztapalapa o en Iztacalco, se ha dirigido con criterios de clase la administración del agua; entonces, el tema ahora es que esa franja de los que no tienen agua o tienen periódicamente agua ya está tocando a las clases medias», explicó vía telefónica.
En el Día Mundial del Agua criticó que con la discusión de normas ambientales, de uso de suelo y hasta por la Constitución la administración del Gobierno de la Ciudad ha actuado como si no hubiera regulación para impedir construir en zonas sin disponibilidad de agua y ha permitido hacerlo en zonas donde no debería.
-¿En cuáles delegaciones las construcciones deberían parar?
-En todas, pero ahora lo de Benito Juárez está muy grave por la cantidad de torres, todo lo que es Churubusco porque además es especulación inmobiliaria, esas cosas no se van a ocupar rápidamente, esta ciudad no tiene condiciones para pagar ese tipo de inmobiliaria, bueno… algunos, pero realmente es un problema serio de especulación inmobiliaria y suponemos que las autoridades están implicadas porque no tendrían una desregulación en prácticamente todo el periodo de Miguel Mancera. La administración anterior dejó, supongo, un programa de desarrollo urbano, entonces no es posible que estemos así en esta desregulación completa, las normas que se discuten y que protestan ciudadanos son normas supletorias de lo que debería ser un programa y un control, pero esto ya está absolutamente fuera de control y es altamente riesgoso para una de las concentraciones más grandes del planeta», advirtió.
«Pero del Sistema de Aguas de la Ciudad de México (Sacmex) marca las áreas donde no hay disponibilidad de agua, ese es el primer requisito para cualquier obra, uno no puede construir en esta ciudad de acuerdo con esa regulación si no hay agua.
«Entonces ha sido sistemático y se ha vuelto eso un hoyo negro donde con el pretexto de que se está regulando, de que hubo la Constitución eso cayó en un vacío; hubo un desconocimiento, pero no tiene por qué no mantenerse vigente la regulación anterior, no hubo derogación», remarcó El maestro en Ecología y Ciencias Ambientales de la UNAM.
-Respecto a las fugas, el director del Sacmex, Ramón Aguirre, ha dicho que en cuanto se arreglen habrá más agua y se compensará, ¿es cierto?
-No es viable, vamos a suponer que sin las fugas se va a hidratar el acuífero, que tardará algunos años en llegar el agua infiltrada, a fin de cuentas es infiltración, la cantidad de sobreexplotación rebasa el doble de lo que se filtra, no es viable nada de los argumentos que está diciendo Sacmex -concluyó.