Implementará Brugada 7 puntos contra inseguridad y suicidio en Metro
CIUDAD DE MÉXICO, 7 de diciembre de 2022.- A tres años de su polémica elección y alborotada toma de protesta, la comisionada Nacional de los Derechos Humanos (CNDH), Rosario Piedra Ibarra, acudió por segunda vez al Pleno del Senado de la República para comparecer y dejar en claro que el organismo no trabaja para una minoría, sino está al servicio del Pueblo, “aunque por ello tengamos que pagar el costo”.
Al defender la autonomía, la Ombudsperson del país asentó: “ejercemos una autonomía que no es para presumir en los foros, o para que alaben los académicos, sino que tiene como centro el interés de las víctimas. Nada ni nadie se ha antepuesto a este compromiso y ellas lo saben. Esa es la autonomía de la CNDH, puesta al servicio del Pueblo”.
En su intervención, Rosario Piedra afirmó que actualmente no se acuerdan las recomendaciones, no se negocian, no hay un solo hecho violatorio comprobado de cualquier autoridad, sea federal o local, que no hayan dejado de atender o recomendar.
Al inicio de su discurso, la titular de la CNDH aclaró que acudió al llamado de la Cámara de Senadores al que, por cierto, jamás negó ni intentó eludir para rendir cuentas y entablar un diálogo constructivo que enaltezca las elevadas funciones.
Austeridad con resultados, asegura Rosario Piedra
“Hay quien dice que la austeridad no necesariamente está asociada con mejores resultados”, expresó al destacar la Reforma en la normativa y en la estructura que ha permitido reorientar los recursos humanos y materiales, de manera que puedan cumplir a cabalidad con la misión constitucional, atender con mayor oportunidad a las víctimas y presuntas víctimas, y reducir los tiempos de respuesta.
“Hace tres años nos encontramos un tremendo ‘elefante blanco’ con gastos en prestaciones y privilegios que absorbían buena parte de los recursos”, refirió al denunciar que la pirámide organizacional se encontraba invertida, toda vez que estructuralmente se contaba con demasiado personal de mando y el número de personal que realizaba actividades sustantivas era insuficiente.
Piedra Ibarra refutó supuestas redes familiares que prevalecían producto del nepotismo y el amiguismo, y un acaparamiento de los cargos por parte de abogados.
Gracias a las reformas que impulsaron en la CDNH, la Comisionada destacó la reducción notable en el rezago, a pesar de que se tenían el mayor número histórico de quejas, solo al 31 de octubre sumaban ya 60 mil 456.
“La realidad es que ahora la CNDH es una institución más eficiente, menos onerosa para el pueblo y con más resultado, también es más plural e incluyente en su composición representativa de los diferentes sectores de la sociedad y sin burocracia”, recalcó.